La institución dependiente de la Diócesis, tras acometer una importante obra, pone en alquiler el inmueble valorando las necesidades económicas de los arrendatarios.
Después de que el 8 de febrero de 2018, Cáritas Diocesana de Osma-Soria se hiciese con la gestión y administración, como único propietario, de las viviendas ‘San Saturio’ de la capital, han sido varias líneas de actuación que se han activado y que se han ido ejecutando de manera simultánea, trabajando paralelamente los aspectos sociales con los administrativos. Dichas viviendas se encuentran en la calle Sanz Oliveros (números 3, 6 y 8) y calle Condes de Gómara (número 5) de la capital soriana.
A partir de este momento, Cáritas diocesana comenzó a trabajar en tres campos de actuación:
Ejecuciones de obra y seguros
A 1 marzo de 2019 se han efectuado los siguientes trabajos, sobre todo en Sanz Oliveros, 3:
De los dos bloques que conforman el edifico Sanz Oliveros 3, uno ya tiene la cubierta rehabilitada y con reposición de teja nueva, antenas y chimeneas intervenidas. Del otro bloque se ha quitado todas las tejas y se está cubriendo con mortero para aislar y reforzar más eficientemente la cubierta.
Las ventanas de todos los pisos que lo necesitaban están cambiadas y las ventanas de los elementos comunes como escaleras, trasteros, etc., también se han cambiado.
Los trasteros se derribaron todos, para poder cambiar todas las tuberías de aguas que estaban rotas, y poner una solera nueva, ya que el suelo estaba destrozado. Se hicieron las canalizaciones pertinentes y nuevos sumideros y arquetas de agua, y se han levantado los trasteros, ejecutando un total de 23.
Todas las zonas de elementos comunes (escaleras, portal y sótanos) tienen sus techos y tramos de paredes nuevas.
Se ha habilitado en la zona del sótano un almacén con tres departamentos: uno como cuarto de limpieza, otro destinado al cuarto de contadores de luz (pues el reglamento así lo exige) y un tercero como cuarto de contadores de agua.
Se han individualizado las aguas limpias, metiendo las acometidas de aguas limpias en cada casa. De esta manera cada vecino podrá pagar por lo que consume.
Las instalaciones eléctricas se centralizaron todas y se ha colocado en las puertas de cada casa las conexiones para que cada vecino pueda contratar con la compañía que desee el servicio de televisión, teléfono, etc…
Se ha intervenido en varios pisos de los 4 bloques con trabajos de fontanería, electricidad, pintura y cocina.
Se ha realizado una medición de ventanas en el bloque de Conde de Gómara 5, para su posterior ejecución.
Se han contratado los seguros de los 4 bloques, independientemente los unos de los otros, pudiendo ampliar alguna cobertura básica más de la que anteriormente se recogía.
Todo ello ha conllevado un coste económico que asciende a 211.558,40€.
Administración
“A medida que vamos avanzando en la obra es más fácil encontrar la confianza con los vecinos”, afirman desde Cáritas diocesana; por eso, “trabajamos paralelamente los aspectos de regularización de contratos con la ejecución de obra”. De este modo, a medida que se van interviniendo en los edificios, se aprovecha para pedir de manera progresiva documentación como los empadronamientos de los vecinos, la ficha de protección de datos, datos fiscales de los mismos, etc.
Aspecto social
En el periodo de tiempo en el que Cáritas ha asumido la gestión de las viviendas, se han realizado diferentes acciones en el ámbito social. A través de reuniones, de visitas domiciliarias o de las visitas a la sede de Cáritas, los vecinos de las viviendas han sido conocedores de la presencia de la trabajadora social de referencia que va a estar para apoyarles y asesorarles en lo que necesiten.
El primer contacto fue para regularizar la situación del alquiler de las viviendas. Se ha procedido a la valoración de su situación socio-económica para regularizar su situación y establecer el alquiler que pueden a asumir de acuerdo a sus circunstancias particulares.
“Las situaciones son muy complejas y las intervenciones se adaptan a las circunstancias personales de cada participante”, han señalado en Cáritas, por lo que “no con todos se pueden marcar los mismos objetivos ni en los mismos periodos de tiempo. Hay situaciones personales que requieren de más apoyo y seguimiento”. Por esta razón, además del acondicionamiento de las viviendas y la mejora de los edificios, es necesaria la intervención social.
Como perspectiva de futuro y como mecanismo para favorecer la integración social de los vecinos, se va a acondicionar un local que sea por y para ellos. Local que pretende ser una herramienta para realizar animación comunitaria en el que se puedan realizar diferentes actividades (charlas sobre el cuidado de la vivienda, actividades de ocio y tiempo libre, información en cuanto a recursos, biblioteca solidaria, espacio para que los menores puedan realizar sus deberes, café y debate, charlas de formación, etc.). “Se pretende que sea un recurso dinámico, que sea un apoyo para la integración”, concluyen los responsables de Cáritas en Osma-Soria.