Plantean siete ejes transversales con medidas como la mejora de la conectividad y la banda ancha, o la incorporación de la valoración del impacto demográfico, en la normativa de nueva redacción y en las licitaciones públicas de las administraciones.
El Consejo de Ministros ha acordado, en su sesión de ayer viernes, las directrices generales de la Estrategia Nacional frente al Reto Demográfico, que incluye un diagnóstico demográfico y territorial y plantea líneas transversales de actuación para luchar contra el envejecimiento y la despoblación y para lograr un mayor equilibrio entre el mundo rural y urbano.
La ministra de Política Territorial y Función Pública, Meritxell Batet, expresaba que los datos "permiten entender bien de qué estamos hablando". El 80% de los municipios españoles está perdiendo población, mientras que el 48,4% está en "riesgo de despoblación" al estar por debajo de los 12,5 habitantes por kilómetro cuadrado. Por otro lado, España disfruta de la esperanza de vida más alta de la Unión Europea, 83,4 años, al tiempo que posee la segunda tasa más baja en fecundidad, 1,31 hijos por mujer frente a la media europea de 1,6.
Junto con la pérdida de población y el envejecimiento, otra tendencia es la progresiva masculinización del territorio. "En el 75% de los municipios hay más hombres que mujeres", detalló la ministra. Por último, respecto a la población flotante y el impacto que supone su llegada estacional, por razones turísticas o de empleo, seis comunidades -Canarias, Cataluña, Baleares, Andalucía, Comunidad Valenciana y Madrid- han acumulado el 86% de las pernoctaciones durante 2018.
Las directrices plantean siete ejes transversales con medidas como la mejora de la conectividad y la banda ancha, o la incorporación de la valoración del impacto demográfico, "como ya pasa con el impacto ambiental o de género", en la normativa de nueva redacción y en las licitaciones públicas de las administraciones.
No obstante, la ministra reconocía que "no existen recetas únicas ni universales" para hacer frente a una situación tan compleja, y que todas las propuestas deberán estar adaptadas a la situación social y económica de cada lugar para aprovechar sus potencialidades.
En este sentido, Batet, que definía la estrategia como "un auténtico acuerdo de país", ha subrayado la importancia de la cooperación entre los gobiernos de España, de las comunidades autónomas y de las entidades locales "para dar coherencia a las diferentes iniciativas públicas, evitar discordancias y efectos de competencia negativa entre territorios". La ministra destacaba que esta colaboración ya se ha producido en la elaboración del documento, hecho que agradeció expresamente.
1.- Afrontar la despoblación
Garantizar la funcionalidad de los territorios afectados por la despoblación y la baja densidad.
Mejorar la competitividad y facilitar el desarrollo de nuevas actividades económicas y el fomento del emprendimiento.
Favorecer el asentamiento y la fijación de población en el medio rural.
2.- Afrontar los desequilibrios de nuestra pirámide de población
Coordinar las acciones referidas a personas mayores, envejecimiento activo y atención a la dependencia en todo el territorio.
Apoyar la puesta en marcha de proyectos de desarrollo socioeconómico de jóvenes, que garanticen el relevo intergeneracional.
Facilitar el desarrollo de proyectos que garanticen la libertad de residencia efectiva de las mujeres en el territorio.
Garantizar las condiciones que favorezcan la crianza de hijas e hijos, y que faciliten la equiparación de la tasa de natalidad al promedio de la Unión Europea.
Asegurar la igualdad de oportunidades y la no discriminación de la infancia por ámbito de residencia.
Trabajar, en coordinación con la UE, para canalizar una migración regular y ordenada, y su arraigo en todo el territorio.
Facilitar la vuelta de los españoles residentes en el exterior que deseen regresar a España.
3.- Gestionar los efectos de la población flotante
Garantizar la prestación de servicios básica para la población residente y flotante en todo el territorio.
Asegurar el dimensionamiento de las infraestructuras y equipamientos necesarios para el desarrollo socioeconómico sostenible de las áreas con intensos flujos de población flotante.
Con la aprobación de las directrices generales de la Estrategia Nacional frente al Reto Demográfico, el Gobierno avanza en el cumplimiento del acuerdo de la Conferencia de Presidentes. Estas directrices, referidas a las actuaciones propias de la Administración General del Estado, se remitirán a las comunidades autónomas, ciudades con Estatuto de Autonomía y representantes de las entidades locales para su discusión junto con sus propias propuestas con el objetivo de presentar finalmente en la próxima Conferencia de Presidentes la Estrategia Nacional frente al Reto Demográfico.
El presidente del Gobierno y los presidentes de comunidades autónomas y ciudades con Estatuto de Autonomía acordaron en la VI Conferencia de Presidentes, el 17 de enero de 2017, afrontar los cambios demográficos que afectan a España y, de forma específica, la elaboración y el desarrollo, por parte del Gobierno de España, y contando con la colaboración de las comunidades autónomas, las ciudades con Estatuto de Autonomía y las entidades locales, de una Estrategia Nacional frente al Reto Demográfico, de naturaleza global y transversal, que diseñe una respuesta conjunta y de futuro para paliar la problemática del progresivo envejecimiento poblacional, del despoblamiento territorial y de los efectos de la población flotante.
La evolución demográfica en España, con aspectos tan positivos como el aumento de la esperanza de vida y el crecimiento generalizado de la población en el siglo XXI pero, también negativos, como se refleja en la pérdida de población de buena parte de nuestro territorio, la baja densidad y la caída de la natalidad, supone un desafío para la sostenibilidad de nuestro Estado del bienestar. Un desafío que puede poner en riesgo la cohesión social, la vertebración territorial y nuestro modelo de convivencia.
El objetivo general de la Estrategia Nacional frente al Reto Demográfico es sentar las bases de un proyecto de país que garantice la igualdad de oportunidades y el libre ejercicio de los derechos de ciudadanía en todo el territorio, a través de la coordinación y cooperación de todas las administraciones públicas, el aprovechamiento sostenible de los recursos endógenos y la estrecha colaboración público-privada.
El trabajo realizado desde el Comisionado del Gobierno frente al Reto Demográfico para la elaboración de la Estrategia Nacional frente al Reto Demográfico se ha guiado por el cumplimiento del acuerdo de la Conferencia de Presidentes, tanto en el objeto del acuerdo como en su metodología de trabajo y contenido.
En su metodología, la elaboración de la Estrategia se ha realizado con la colaboración de las comunidades autónomas, ciudades con Estatuto de Autonomía y entidades locales. Por ello, se constituyó en septiembre de 2018 un grupo institucional con comunidades autónomas y representantes de la Federación Española de Municipios y Provincias. Con una metodología de trabajo consensuada, a lo largo de los meses siguientes se han celebrado reuniones periódicas sobre los ejes de la estrategia.
Asimismo, se constituyó el grupo de trabajo específico sobre Reto Demográfico en el marco de la Comisión Nacional de Administración Local, que abre una interlocución directa con representantes de ayuntamientos y de diputaciones provinciales.