Jornada redonda para los equipos sorianos en el fútbol humilde, a excepción del tropiezo (1-0) del conjunto colegial en la Regional. Esa derrota no estuvo exenta de polémica: los de Modrego se quejaron de una pena máxima inexistente ante el Becerril.
En el repaso de la jornada del fútbol humilde, brillan los triunfos del CD San José femenino (2-0) en la DobleG de Castilla y León, la goleada (5-0) del CD Tardelcuende y la importantísima victoria (4-3) del Calasanz en la Primera Regional de Aficionados. Esa división comunitaria también vio cómo el CD San José cedía por la mínima (1-0) ante el Becerril. No conforme con el ajustado marcador final, los de Garray protestaron por el penalti que les acabó costando la derrota. Entendieron que no había pena máxima.
Una de cal y otra de arena para el Club Deportivo San José en la DobleG de Castilla y León y en el Grupo A de la Primera Regional, respectivamente. Su bloque femenino sigue afianzado en la segunda plaza, ascenso directo, de la última división castellana y leonesa. A través de dos saques de esquina, transformados en goles por Alba Maldonado e Yessenia, las sorianas se deshicieron del CD Monteresma en San Juan de Garray. Las de Sergio Paz rompieron con su mala dinámica en su lar tras dos empates seguidos en Soria.
Hicieron sucumbir a un equipo de la zona templada antes de visitar la siguiente semana al San Pío X. Las salmantinas, a dos puntos de las blanquiverdes, podrían discutirle ese ascenso directo a las de Garray. Esa codiciada plaza, con un líder (Atlético Lince) ya distanciado, está en un pañuelo, y en él se encuentran el San José, San Pío y CD Navega.
Peor suerte corrió el Club Deportivo San José masculino en la Primera Regional. Los de Javi Modrego cayeron por la mínima (1-0) en el Polideportivo Mariano Haro. David Díez batió a David José Salazar desde los 11 metros. El varapalo que se llevó el San José se produjo en la recta final del choque, cuando el colegiado Morales Fernández decretó un penalti que el San José, mostrando una secuencia fotográfica para validar la inexistencia de la infracción, entendió que no fue tal.
El Club Deportivo Tardelcuende goleó ayer por la tarde a El Espinar-San Rafael (5-0) en el Abel Antón. Los de Mario Salvachúa dejaron sentenciado el choque en la primera mitad con un favorable 4-0 en el luminoso. Los tantos de Iraola, de la Rosa, Jorge y Guillermo Pérez dejaron la partida vista para sentencia. Álvaro Moreno, en el 79’, acabó de destrozar a los segovianos con el definitivo 5-0. El CD Tardelcuende suma su segunda victoria seguida y deja sellada su permanencia en la Regional castellana y leonesa.
Al Calasanz le costó dos partidos entrar en otra buena dinámica, pero los de Antonio Fernández volvieron a ganar dos semanas después, tras acumular dos derrotas consecutivas (Unami y Villarcayo Nela). El sábado, en el Polideportivo San Andrés, el Calasanz reinó sobre el Atlético Palencia en un marcador muy abultado (4-3). Estos tres puntos les permiten a los sorianos sobrepasar, precisamente, a los palentinos en la tabla y dejar el descenso a 9 puntos de diferencia.
En palabras de Antonio Fernández, míster del Calasanz, fue “una locura de partido”. El Atlético Palencia, dentro de una pésima racha resultadista, con el de anteayer ya acumula 10 jornadas sin ganar, intentó gobernar en el caos. Al menos, se adueñó del esférico en los primeros compases. Se aproximaba más al área que el propio Calasanz, sin embargo, y a pesar de esa superioridad posicional, no encontraban la manera de conectar el último pase para poner en apuros a Mínguez.
Avisaron los de Fernández con dos incursiones ofensivas. A la tercera fue la vencida: a Adrián Martínez, quien controló magistralmente con el pecho, le metieron un balón en profundidad. Según cayó el esférico, a bote pronto, Adrián se la cruzó a Roberto Ortega (1-0). Pero no se cerró el partido; es más, se abrió la brecha. El Calasanz le permitió lanzar una serie de faltas a los palentinos, quienes hacen daño a balón parado, y el Atlético Palencia empató en la salida de un córner. Valencia superó a Mínguez con la testa (1-1).
Tuvo poco balón el Calasanz en los primeros 45 minutos. En la segunda mitad, se abrieron las puertas del manicomio en el San Andrés. Se cantaron hasta cinco goles. Fernández tocó las bandas para hacer daño al espacio defensivo de los palentinos. Jaime superó las espaldas de la zaga palentina y sirvió un esférico que quedó entre los centrales y la portería. Esa indecisión la cazó Rey (2-1). A los cinco minutos, el Calasanz volvió a regalarle un saque de esquina al Atlético Palencia: empató (2-2) Fabián Rodas después de que los visitantes sacasen en corto esa jugada de estrategia.
En una falta de entendimiento entre los centrales blanquiazules, Natanael Pérez cometió penalti y vio la roja directa. Hugo Rodríguez avanzó (2-3) por primera vez al Atlético Palencia desde los 11 metros. El Calasanz perdía a falta de 10 minutos y se quedaba con ese mismo número de jugadores sobre el verde, 10.
Prosiguió esa locura en el minuto 86: en 10 minutos, del 80 al 90, se produjeron dos remontadas, que acabaron beneficiando a los locales: “Cambiamos de mentalidad y sacamos el orgullo”, resume Fernández. Jaime, en el 86' se plantó delante del portero y Juan Manuel Pan, central, sólo pudo remediar esa acción ofensiva cometiendo un nuevo penalti. No lo falló Adrián (3-3). Óscar Enrique se marcharía a la caseta en el 90’, pues el atacante cometió una agresión (pisotón y puñetazo al aire).
Las tablas no le venían mal al Calasanz, pero entre Vijuesca y Jaime arañaron el preciado triunfo. En un saque de esquina, el primero la puso en el área pequeña y desde ahí la empaló Jaime (4-3) para desnivelar nuevamente el marcador en el San Andrés. Así se quedaría.