La Institución Provincial colabora por segundo año consecutivo con este proyecto y eleva su aportación hasta los 15.000 euros. El pasado año, 21 farmacias del medio rural participaron en este programa que permitió atender a 80 pacientes.
El presidente de la Diputación de Soria, Luis Rey, y el presidente del Colegio de Farmacéuticos de Soria, Javier Alonso, han suscrito hoy el convenio por el que se renueva la colaboración entre ambas instituciones para el desarrollo del proyecto para el mantenimiento de un servicio profesional de mejora de adherencia terapéutica a pacientes dependientes del medio rural.
En esta ocasión, la Diputación amplía su colaboración hasta los 15.000 euros. Luis Rey ha asegurado que “es un honor para la Diputación firmar este convenio” que permite desarrollar “un proyecto pionero en España de atención desde la farmacias, de fijar adherencia terapéutica de los pacientes y con el objetivo de que se pueda seguir avanzando en el tratamiento de nuestros mayores en los pueblos”. El presidente de la Institución ha explicado que este convenio cumple una doble perspectiva, “atender mejor a los mayores de nuestra provincia, a las personas que tienen tratamientos pautados, crónicos en muchos de los casos” y “ayudar a las farmacias dentro del reto demográfico que tenemos por delante porque, servicio que se va de un pueblo, servicio que se lleva detrás vecinos y vecinas de cada municipio.
La farmacia es uno de esos servicios esenciales en los pueblos, que hay que tratar de conservar a toda costa para no perder servicios en la provincia que además en este caso son básicos ya que son servicios sanitarios”.
Rey ha explicado que el incremento de la aportación de la Diputación de 12.000 a 15.000 euros se justifica básicamente en el incremento del tiempo del convenio, que pasa de los meses de julio a noviembre en los que se desarrolló el pasado año, a todo el ejercicio 2019. “El año pasado se atendió a 80 pacientes y este año aspiramos a que pueda ser alguna más. Participaron 21 farmacias, el 43% del total provincial, y también aspiramos a que pueda entrar alguna más”, ha añadido.
Por su parte, el presidente del Colegio de Farmacéuticos ha querido agradecer a la Diputación el mantenimiento de este proyecto “que tiene una doble vertiente: social y sanitaria”. “Sanitaria en el sentido de que se mejora, a través de unos sistemas personalizados de dosificación la adherencia de los pacientes en el medio rural, que son personas mayores polimedicados y en muchos casos o solos o que conviven con personas también de avanzada edad.
En este sentido, en 2019 hemos incluido también a pacientes que están en situación de dependencia”, ha explicado. En relación a la parte social, Alonso ha explicado que el proyecto “ha arrojado unos resultados en los que los pacientes mejoraban un 50% su adherencia al tratamiento, mejoraban un 40% el conocimiento del mismo y todo eso ha redundado en una disminución del 80% de los ingresos hospitalarios, de tal manera que se evita que esa persona mayor que está en su pueblo tenga que ir a una residencia”.
Este proyecto está incluido dentro del Programa Megara, impulsado desde el Colegio de Farmacéuticos de Soria, cuyo objetivo es mejorar la atención farmacéutica a los pacientes y a la población soriana en general y, muy especialmente, a los que requieren una atención específica diferenciada, ya sea por su situación física, económica, geográfica o social, en todos los aspectos relacionados con el medicamento y, en defensa y promoción del derecho a la salud de las personas.
Específicamente, este proyecto tiene como objetivo facilitar el acceso a los servicios profesionales farmacéuticos de mejora de la adherencia terapéutica a personas del medio rural soriano a las que se les haya detectado problemas de cumplimiento de su tratamiento farmacológico tras una evaluación previa. En esos casos se planifican estrategias de mejora de adherencia y el proceso de reacondicionamiento de medicamentos prescritos y dispensados de forma personalizada, en sistemas multidosis, con el objeto de asegurar la utilización correcta de los mismos por los propios pacientes, sus familiares o cuidadores a través de una buena información y correcta preparación.
La dispensación personalizada se realiza a través de sistemas personalizados de dosificación, actividad incluida dentro de la Atención Farmacéutica mediante la cual el paciente recibe la medicación prescrita por su médico, preparada por la Oficina de Farmacia en dispositivo tipo blíster, con alvéolos en los que se distribuye la medicación que toma el paciente, para un tiempo determinado.
Serán beneficiarios del proyecto pacientes a los que por sus características personales se les haya detectado un posible incumplimiento terapéutico y la conveniencia de ser atendidos con un sistema personalizado. Durante este año, se mantendrán los pacientes del proyecto piloto puesto en marcha el pasado año en base al baremo de priorización según sus necesidades sociales y sanitarias, al considerarse la necesidad de continuidad de los pacientes en este servicio. Además, se podrán incorporar nuevos pacientes en función del cupo existente.
La Diputación Provincial y el Colegio de Farmacéuticos firmaron el pasado año por primera vez el convenio de colaboración que permitió poner en marcha, de julio a noviembre, el proyecto piloto para la instauración de un servicio profesional de mejora de adherencia terapéutica a pacientes dependientes del ámbito rural. En dicho proyecto participaron el 43% de las farmacias rurales y 80 pacientes, que presentaban una media de edad de 82 años y más de 8 medicamentos prescritos. El 80% vivían solos o con una persona mayor de 70 años en pueblos de menos de 500 habitantes y el 34% tenían reconocido un grado de dependencia o discapacidad. Se ha obtenido un resultado de 9,5 sobre 10 en la encuesta de satisfacción realizada entre los pacientes y una mejora en la calidad de vida de estas personas.