El agricultor soriano reconoce que "soy lo que soy gracias a la educación y el trasporte público” en una de sus entrevistas más íntimas.
Pregunta: ¿Qué es lo último que hace antes de acostarse?
Respuesta: Lavarme los dientes y leer un poquito.
P: Cuando tiene una tarde libre, ¿A qué le gusta dedicarla?
R: Tengo un hijo de 15 años que no me deja parar. Le gusta la pesca, el campo, la caza, la bici, el senderismo... Tengo dos hijos, el mayor no, pero el pequeño ha salido al padre totalmente. No me deja parar, en cuanto tenemos una tarde libre... Ayer mismos estuvimos en el Tera, que están los barbos apretando.
P: ¿Libro o película? Recomiéndeme alguno.
R: Las películas me aburren últimamente. Como no sea una peli muy buena me duermo. si no me engancha, desconecto enseguida. El último libro que he leído es `La lluvia amarilla´ de Julio Llamazares. Va mucho conmigo, del entorno rural, de las raíces, de lo nuestro... Miguel Delibes también es un autor que me gusta mucho.
P: ¿Pone música cuando se ducha? ¿Canta?
R: Bueno... Oigo de todo, desde Ska-P hasta Manu Carrasco. También flamenco... Pongo YouTube y lo que va saliendo… Escucho de todo.
P: ¿Cuál es su palabra favorita?
R: Solidaridad. Creo que es una palabra que resume todo lo que somos, sobre todo para los que tenemos un origen humilde. Yo vengo de una familia humilde, de una zona rural pobre y gracias a un colegio público, a un transporte público,... quizá hoy pueda estar aquí.
P: Si pudiera viajar en el tiempo, ¿iría al pasado o al futuro?
R: Hay que ir al futuro siempre. Hay que pensar en lo que vamos a hacer mañana, siempre en positivo. A partir de este momento solo tenemos futuro por delante.
P: ¿Cómo era en el colegio?
R: Pues era un chico tímido, poco trasto, cumplidor... el niño al que quieren todas las abuelas. Nosotros ayudábamos mucho en el campo. Con 6 años nos cerraron la escuela en Fresno de Caracena y fuimos a la escuela hogar de Berlanga. Era poco trasto, eso sí; de seises y sietes.
P: Un poco más mayor, ¿era muy fiestero?
R: A partir de los 14 dimos el salto a Soria. Empezamos a salir por la Rota, al Fusión, los famosos carnavales de la calle Real, las verbenas de los pueblos... Aquellos veranos fueron unos veranos muy buenos.
P: ¿Quién es la persona que más ha influido en tu forma de ser?
R: Mi padre. Yo la disciplina la llevaba puesta de casa a pesar de estar lejos. Y, por supuesto, mi mujer que he tenido una suerte tremenda con ella.
P: ¿Qué no le enseñó nadie y tuvo que aprender a base de palos?
R: En el mundo rural estábamos muy limitados y siempre hemos tenido que ser muy autodidactas. Hemos tenido que luchar muy solos, con una carencia de información tremenda.
P: Dígame algo que no soporte.
R: Que me cojan del brazo para hablar conmigo. Lo siento, pero no lo aguanto.
P: Un lugar al que haya viajado y que le haya impresionado
R: Tailandia, por el choque de culturas. La verdad es que yo era muy reacio a viajar hasta que descubrí que es una oportunidad tremenda.
P: Y un viaje pendiente...
R: Nueva York. Es algo que tengo apuntado. Al final Estados Unidos siempre tiene la atracción de las películas. Me gustaría viajar más, es como que lo necesito. Cuando pienso que me daba miedo, que decía aquello de qué se me ha perdido a mi...