La exposición ’30 años de un siglo pasado’, que alberga el Museo Numantino, concluirá este domingo, 1 de septiembre, y espera recibir en estos días a más espectadores que se sumen a los casi 5.000 que ya la visitaron en julio.
El Museo Numantino alberga desde el pasado 16 de julio la exposición fotográfica ’30 años de un siglo pasado’ que concluirá este domingo, 1 de septiembre. Solo en julio se contabilizaron 4.844 visitantes. El interés de la exposición ha hecho que algunos de estos espectadores volvieran y que las visitas hayan sido de duración mayor por el interés de reconocer los lugares y encontrar detalles de un pasado reciente y a la vez tan lejano.
Esta exposición, que se incluye en las actividades de celebración del Centenario del Museo Numantino, como un preámbulo, tiene como objetivo mostrar a través de fotografías antiguas, cómo era la sociedad y como eran los espacios en que se desarrollaba la vida de los habitantes de la provincia de Soria entre los años 1900 y 1930.
En la muestra se puede apreciar cómo era el contexto socioeconómico en que el Museo Numantino surgió como un proyecto, se construyó y se consolidó en los treinta primeros años del siglo pasado. Algunos espacios y arquitecturas se perdieron, otros se han transformado gravemente, algunos aún pueden ser reconocidos.
Los pueblos de la provincia entonces estaban habitados: se nacía y moría en ellos; el trabajo era fundamentalmente agrícola y ganadero, con algunas variantes dependiendo de las áreas geográficas. Se celebraban bodas, romerías, etc., siguiendo el ciclo de la vida. Los espacios públicos reunían y en ellos la vida era social, la casa albergaba, protegía, cobijaba.
El atuendo era el tradicional según el trabajo o la fiesta. En la ciudad podía apreciarse más claramente la diferencia social en base a la riqueza y por tanto también al acceso a la educación.
Las fotografías que han facilitado el Archivo Histórico Provincial de Soria, el Museo Sorolla y Tomás Pérez Frías de su colección particular, sumadas a las que proceden del Archivo del Museo Numantino, permiten comprender aquel momento y a través de ello comprender mejor nuestro presente incierto.
El día 2 se procederá al desmontaje de esta exposición para iniciar los trabajos de instalación de la exposición ‘Museo Numantino 100 años. 1919–2019’.
El momento histórico en que nace la idea del Museo Numantino, se construye y abre al público es sorprendente: Soria, incluida la ciudad, era eminentemente rural, una pequeña industria incipiente apuntaba a un tiempo nuevo que tímido no se desarrollaría con fuerza. Se comienzan a construir escuelas rurales, con el objetivo explícito de mejorar la educación del país lográndose la mejora en los índices de alfabetización.
Reina Alfonso XIII en un tiempo que prolonga las incertidumbres del pasado. Los poderosos de la provincia son aquellos que poseen mayor riqueza y son los que ostentan el poder político. En el campo, los agricultores y ganaderos, pequeños propietarios o arrendatarios, viven sin apenas variaciones, como desde hacía siglos. La burguesía es poco numerosa y no tiene el ímpetu que tendrá en otras provincias. Una excepción notable fue el mecenazgo de Benito Aceña en la construcción de la línea de ferrocarril entre Torralba y Soria y la construcción del Museo Numantino.
Culturalmente, Soria vive un periodo de gran interés: se practican excavaciones arqueológicas en Torralba y Ambrona, después Numancia, y aun después importantes yacimientos celtibéricos y otros romanos como Uxama, o Tiermes. Machado es profesor y más tarde llegará Gerardo Diego. Mariano Granados, Gervasio Manrique, Blas Taracena, José Tudela, entre otros, crean y participan de un clima cultural de enorme vitalidad.
Al observar las imágenes de Soria, tan fuertemente rural, tan escasamente desarrollada en ciudad, causa admiración la fuerte apuesta que un grupo de personas realizó en su momento a favor de la cultura. Saavedra, Mélida, Álvarez, Schulten, Gómez Santacruz, entre otros, hicieron ver la necesidad de un Museo en Soria. Fue una iniciativa, innovadora en concepto de museo y tipología arquitectónica, que nació para servir de motor y ejemplo.
El 18 de septiembre de 1919 se inauguró el Museo Numantino con la presencia del rey Alfonso XIII. Era la culminación de un largo proceso colectivo, social y cultural que había nacido con la recuperación activa de la memoria de Numancia en el momento en que Saavedra practicó las primeras excavaciones que se pueden considerar arqueológicas, en el cerro de La Muela de Garray.
Vino después el equipo alemán dirigido por Schulten que incorporó al escenario numantino el descubrimiento y conocimiento de los importantes campamentos romanos y muy poco después la Comisión de Excavaciones Arqueológicas de Numancia. Pero la expectativa social superaba el importante objetivo científico.
Enraizada a lo largo del tiempo, Numancia era un patrimonio colectivo del país que afloraba en momentos críticos de su historia con significados cambiantes, evolucionados, polisémicos, sobre la base de una esencia inalterable del mito. Con fuerza lo hizo a finales del siglo XIX y principios de siglo XX por razones, una vez más, políticas y sociales.