Los sorianos pierden por 1-0 ante el Candeleda, en un partido donde el el portero local malogra el acoso de los visitantes.
Mal comienzo aunque no tanto en el juego para el Calasanz de fútbol esta temporada en la Regional de Aficionados de Castilla y León. Los sorianos viajaban este sábado a Candeleda (Ávila) para abrir curso aunque el marcador y Diskuy, el portero de los locales, malograba un marcador pese al empeño de los visitantes.
Tras unos veinte primeros minutos de tanteo y recelo de ambas escuadras, el equipo colegial se comenzaba a estirar afianzando el balón en su poder, como así lo denotaban las buenas jugadas por banda protagonizadas por Rey y Adri, mientras Tello y Cascante movían el esférico con comidad. Factores que llevaban a amenazar con claridad el marcador para los locales con remates claros y que eran desbaratados por el cancerbero abulense.
Finalizaba el primer tiempo con dominio claro del Calasanz, que en la segunda parte volvía a dominar el encuentro, haciendo suyo el juego y sin dejar a los locales siquiera atravesar el medio del campo. Sin embargo, en sus incesantes oleadas de ataque, los sorianos no conseguían apropiarse el marcador.
Finalmente, una falta cerca del área soriana en el minuto 81 que se cerraba con un rebote fortuito del local Guti que daba la victoria a los locales, que por otro lado se hallan celebrando sus fiestas patronales. Doble motivo de celebración para los de Candeleda, en un partido con tres expulsiones, dos para los visitantes que deberán afinar puntería y una para los locales.