El presidente de la Junta reclama un nuevo modelo de financiación dentro del compromiso con la España Constitucional y el sistema de las autonomías.
Durante su intervención en el Foro “Reto Demográfico y Competitividad Empresarial”, organizado por El Norte de Castilla, Fernández Mañueco ha defendido el Estado de las Autonomías como modelo básico de convivencia, del que Castilla y León es un ejemplo. Y ha insistido en la reclamación al Gobierno de un nuevo modelo de financiación autonómica suficiente para gestionar los servicios básicos que las autonomías tienen asignados. Un modelo de financiación acorde a la situación real, que tenga en cuenta la dispersión, el envejecimiento y la superficie porque afecta directamente al coste de los servicios y, por tanto, a la calidad de vida de las personas.
El sistema de financiación actual no sirve, ha asegurado, ya que es insuficiente y genera desequilibrios con su enfoque hacia los territorios y no hacia las personas. Y la situación se complica cuando un Gobierno central en funciones retiene las cantidades que adeuda a las comunidades autónomas.
Por ello, el nuevo modelo de financiación será una de las batallas que desde la Junta se seguirá afrontando junto a las otras comunidades, avanzando en la línea de la declaración institucional firmada por Castilla y León, Galicia, Asturias, Castilla-La Mancha, La Rioja y Aragón el año pasado en Zaragoza, para la reforma del sistema de financiación autonómica con un consenso multilateral en el seno del Consejo de Política Fiscal y Financiera.
Una reclamación que Fernández Mañueco ha hecho desde un autonomismo útil, leal y solidario para contribuir al progreso de Castilla y León y del conjunto de España. “Porque nuestra Constitución estableció un fuerte vínculo entre Estado Autonómico y Estado Social, al encargar precisamente a las Comunidades la gestión básica de esos servicios públicos. Sin embargo, esta función ha sido intencionadamente olvidada por muchos para servir a sus intereses”, ha afirmado el presidente de la Junta, quien ha señalado que algunos consideran al Estado Autonómico un marco ya insuficiente y siguen un camino de ruptura constitucional y de disolución de la Nación Española. "Y otros quieren agrandar sus posibles disfunciones o carencias para abogar por su desaparición", ha remarcado.
Ante unos y otros, ha afirmado que el Estado de las Autonomías, con las mejoras oportunas, debe mantenerse como modelo básico de convivencia y que además es una herramienta eficaz para hacer frente al reto demográfico. El presidente autonómico ha señalado que la crisis demográfica es un problema común en las sociedades desarrolladas y ha asegurado que, al contrario de lo que piensan muchos, el saldo migratorio en Castilla y León es positivo porque llegan más personas de las que se van. Pero, según ha admitido, este crecimiento de la población por los movimientos migratorios no es suficiente para contrarrestar la baja natalidad.
Por ello, según ha recordado, el objetivo es claro: Dar la vuelta a la tendencia, crecer en población y en oportunidades, especialmente en el mundo rural. En sus palabras, son necesarias medidas globales y estrategias conjuntas, en España y en la Unión Europea, pero ha garantizado que todas las políticas de la Junta tendrán en cuenta la perspectiva del reto demográfico.
Así pues, ha explicado que pondrán en marcha medidas para potenciar los servicios públicos, impulsar el desarrollo rural, incentivar la natalidad y facilitar la conciliación laboral y familiar, reforzar la presencia y la cercanía de las administraciones en todo el territorio y aumentar la actividad económica, la creación de empleo y las oportunidades.
Servicios de calidad
Fernández Mañueco ha explicado que es imprescindible ofrecer servicios de calidad en el mundo rural igual que en las zonas urbanas, como una sanidad universal, gratuita y de calidad; unos servicios sociales y de atención a la dependencia de primera; una educación de calidad con escuelas de infantil y primaria allí donde estudien 3 niños; y un transporte al alcance de todos y en todo el territorio. Asimismo, ha reiterado que la red de internet debe alcanzar todos los núcleos de población.
Conciliación de la vida familiar y laboral
Para hacer frente al reto demográfico, el presidente autonómico ha asegurado que es básico también apostar por políticas de conciliación de la vida laboral y familiar. En este sentido, la Junta ha convocado nuevas ayudas a las familias para gastos de guardería, que completará la desgravación fiscal que la Junta ya aplica; continúa impulsando el programa Crecemos para los niños de 0 a 3 años en el mundo rural; extenderá el Programa Conciliamos y creará “Canguros” de atención diurna en los municipios más pequeños.
Asimismo, se mantendrán los programas Madrugadores y Tardes en el Cole para facilitar a los padres la adaptación a sus horarios de trabajo al de los centros educativos.
Políticas del territorio
El presidente de la Junta de Castilla y León ha manifestado que se deben centrar esfuerzos en las políticas de territorio para garantizar el futuro de los pequeños municipios y de las diputaciones provinciales, que, según ha señalado, realizan una enorme e importante labor. Una administración cercana a las personas es vital, según ha defendido Fernández Mañueco, quien ha insistido en que es fundamental que las corporaciones locales dispongan de financiación suficiente para prestar los servicios a sus vecinos y atender las necesidades.
Fiscalidad inteligente
Durante su intervención, ha asegurado que es primordial una política tributaria acorde con las circunstancias, una fiscalidad inteligente, moderada, que contemple un trato positivo hacia el mundo rural y las zonas con menos población. En este sentido, se ha referido al inicio de los trámites para la práctica supresión del Impuesto de Sucesiones y Donaciones y el mantenimiento de la previsión de una bajada progresiva del IRPF vinculada al crecimiento económico.
Ha indicado también que aplicarán tipos reducidos en el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales para la primera vivienda en el mundo rural, impuesto que tendrá un tratamiento favorable en transmisiones de tierras y elementos productivos en el mundo rural, a lo que se unirá un tipo reducido aplicable a la adquisición de inmuebles que constituyan la sede social o centro de trabajo de empresas o negocios profesionales.
Empleo
El empleo es fundamental para afrontar el reto demográfico, ha subrayado Fernández Mañueco, quien ha manifestado que “el empleo estable y de calidad fija población y es la principal palanca para garantizar la calidad de vida”. Este gran objetivo, según ha asegurado, se impulsará con fuerza de la mano del Diálogo Social, para avanzar con más garantías de estabilidad.
Junto a las políticas activas de empleo, para las que se están movilizando más de 100 millones de euros este semestre, el presidente ha defendido que la mejor fórmula es crear un contexto favorable para pymes y autónomos, con medidas para favorecer su crecimiento y acceso a la financiación, como el Plan de Crecimiento y Consolidación de Pymes, con 200 millones de euros, con el objetivo de crear 4.000 empleos; desarrollando políticas de innovación y de internacionalización que hagan ganar competitividad a las empresas; abaratando el precio del suelo industrial una media del 15% a partir del próximo año; y con la extensión de la tarifa plana para nuevos autónomos, como mínimo los primeros 24 meses, o los 30 meses en el caso de los emprendedores de las municipios de menores de 5.000 habitantes.
Fernández Mañueco se ha referido también a líneas para aprovechar elementos de futuro que hay en el campo de Castilla y León, como una agroalimentación que sea cada vez más dinámica, con nuevos recursos que hacen a la Comunidad líder en la producción de energías limpias y atractivos naturales, monumentales y culturales que pueden generar muchas oportunidades en torno al turismo rural.
Finalmente, el presidente de la Junta ha defendido un nuevo modelo productivo, con el que Castilla y León estará en la vanguardia de la nueva sociedad del talento de la mano del sector industrial y de las universidades, haciendo hincapié en su vinculación con el tejido productivo y en la transferencia del conocimiento a las empresas.
Un nuevo modelo en el que se impulsarán actuaciones como la puesta en marcha en Castilla y León de las Oficinas de captación y retorno del talento; los programas con las universidades para las prácticas de 400 egresados en empresas tractoras de la Comunidad para mejorar su cualificación, retener talento y ganar competitividad; o el programa de prácticas en Renault para 60 titulados en desempleo, que podrán especializarse y ampliar sus conocimientos en una empresa puntera a nivel mundial ubicada en esta tierra.