El director general de Acción Exterior, Carlos Aguilar, ha participado hoy en el 137º Pleno del Comité Europeo de las Regiones, celebrado en Bruselas. Las demandas de Castilla y León ante Frans Timmermans, vicepresidente primero de la Comisión Europea, y Nicolas Schmit, comisario europeo de Empleo y Asuntos Sociales, se han centrado respectivamente en la urgencia y la necesidad de que los territorios que ya no cuentan con explotaciones mineras de carbón no sean olvidados y se activen los mecanismos y los fondos de transición justa para regiones mineras; y en la adopción de medidas concretas para fomentar el empleo de calidad en territorios europeos como Castilla y León, afectados por el grave problema de la despoblación y el envejecimiento.
La reivindicación de soluciones para las cuencas mineras de Castilla y León ha sido un asunto trascendental en el transcurso de este Pleno del Comité de las Regiones. El director general de Acción Exterior, Carlos Aguilar, ha intervenido públicamente para trasladar a Frans Timmermans, vicepresidente de la Comisión Europea, que Castilla y León debe incluirse como región europea beneficiaria de los Fondos de Transición Justa.
Aguilar ha resaltado que la propia denominación de esta financiación europea incluye los términos “transición” y “justa”, y debe ser precisamente así. Sobre el primer, el alto cargo de la Junta ha señalado que ese fondo no debe regirse por tener minas en las regiones europeas, sino que debe gestionarse para afrontar la transición hacia un nuevo modelo económico: “En Castilla y León y en otras regiones esa transición aún no está realizada y se necesita urgentemente”, ha enfatizado el director general de Acción Exterior. Al tiempo, Aguilar también ha aseverado que para que el fondo sea justo no se puede abandonar o ignorar a los que han dejado de contaminar: “Parar las minas se puede haber hecho en un día, pero la economía de nuestras zonas mineras ha quedado destrozada y si no se pone remedio seguirá destrozada en el futuro”.
Como contexto de su intervención, Carlos Aguilar ha recordado al vicepresidente de la Comisión Europea que Castilla y León está sufriendo ya los problemas de dejar de extraer y utilizar carbón y sufre graves consecuencias: altas tasas de desempleo, destrucción de la economía, problemas de gestión de energía y pérdida de población en nuestras zonas mineras; en definitiva, las zonas mineras de Castilla y León requieren soluciones para no quedar totalmente despobladas, pues el carbón era su forma de vida.
La exigencia de que Castilla y León sea beneficiaria de este Fondo de Transición Justa se sustenta en que esta Comunidad no tiene ya minería del carbón ni tampoco una alternativa económica, “pero hemos hecho lo que la Unión Europea quería y exigía antes de 31 de diciembre de 2018”, ha recordado Aguilar. Antes de esa fecha se cerraron explotaciones mineras y tras ellas la actividad de las centrales termoeléctricas que queman carbón. Cumpliendo también con las exigencias europeas, Castilla y León está a punto de acabar con las emisiones de CO2 procedentes del carbón. Ya casi no contaminamos. “Se ha hecho lo que Europa quería”, ha destacado Aguilar.
En una alocución anterior en el Plenario, ante el comisario europeo Nicolas Schmit, Carlos Aguilar ha expuesto que “mucha población joven se marchó de Castilla y León por la falta de empleo de calidad, por la falta de oportunidades de trabajo” y que las regiones despobladas tienen en el envejecimiento de la población uno de sus principales problemas. Por ello, el director general de Acción Exterior ha hecho hincapié en que “la principal oportunidad que hay para las regiones que se despueblan es el empleo, con estrategias que fomenten y faciliten la creación de empleo”.
En este sentido, la petición expresa de Castilla y León, hoy en el Comité de las Regiones, es que las regiones despobladas y envejecidas de Europa reciban apoyo para generar empleo de calidad y facilitar con ello la permanencia de los jóvenes y la llegada de otros, y repoblar así esas zonas más afectadas. Carlos Aguilar ha solicitado “que la fijación de políticas de empleo o de los propios criterios del Fondo Social Europeo contemple la realidad de regiones europeas despobladas como Castilla y León ya que el empleo, la creación de empleo, es la mejor forma de luchar contra la despoblación”.