Las actuaciones en el retablo, ubicado en la iglesia vallisoletana de Santiago, se llevan a cabo con la colaboración del Museo Nacional de Escultura y la propia parroquia. La inversión para esta intervención asciende a casi 100.000 euros y está previsto que concluya en torno al mes de mayo de 2020.
El pasado verano comenzaron los trabajos de restauración del retablo de la Epifanía de la parroquia de Santiago de Valladolid. La actuación tiene como fin la correcta conservación del retablo, garantizando su estabilidad y perdurabilidad en el tiempo, así como la recuperación de sus valores estéticos y artísticos.
Para ello, se están realizando los siguientes trabajos: el desmontaje del retablo; adecuación del testero y solería de la capilla; trabajos de carpintería de restauración y consolidación estructural; tratamientos de asentado de aparejos y policromías; limpieza, reintegración cromática y montaje del retablo con la reubicación de las esculturas en el mismo.
En estos momentos, una vez desmontado el retablo, se está avanzando en la consolidación estructural y limpieza de los dorados y policromía, recuperando así su cromatismo real, que se encontraba muy distorsionado por el oscuro estrato de suciedad y barnices oxidados presentes al inicio de los trabajos de restauración.
La Consejería de Cultura y Turismo acomete la restauración de la arquitectura del retablo, así como la realización de todos los estudios, análisis y caracterización de materiales que lo conforman. El importe de esta actuación asciende a casi 100.000 euros. La supervisión técnica de los trabajos está siendo realizada por el Centro de Conservación y Restauración de Bienes Culturales de Castilla y León.
La intervención se lleva a cabo con la colaboración del Museo Nacional de Escultura y la Parroquia de Santiago. El Museo, que ha realizado los trabajos de restauración de los grupos escultóricos, llevará a cabo, antes de la finalización de la restauración de la totalidad del retablo, que está prevista en el mes de mayo de 2020, diferentes muestras donde se podrá contemplar el resultado de los trabajos.
Otra de las colaboraciones con las que cuenta esta intervención es la de la Unidad de Gestión de Riesgos y Emergencias de Patrimonio Cultural de Castilla y León (UGRECYL), a través de la Unidad Militar de Urgencias (UME), cuya participación ha sido fundamental en el momento del desmontaje del retablo. Se ha podido conocer la técnica constructiva de este tipo de retablos y cómo se realiza su desmontaje con las mayores garantías de conservación de sus diferentes elementos.
Además, esta intervención permitirá ahondar y profundizar en el conocimiento de las técnicas artísticas y constructivas utilizadas por Berruguete en la realización de sus retablos y esculturas. Durante el desarrollo de los trabajos, se vienen realizando labores de difusión y divulgación entre las instituciones colaboradoras, tanto de la figura y obra de este insigne artista del Renacimiento español como de los estudios y trabajos de restauración propiamente dichos.
Se da la circunstancia de que este retablo de Berruguete es el único de la provincia de Valladolid que se conserva in situ. Los otros dos -uno procedente de la iglesia del monasterio de San Benito y el otro del monasterio La Mejorada- actualmente forman parte de la colección del Museo Nacional de Escultura.
La hechura del retablo de la Epifanía de la parroquia de Santiago está documentada por el encargo realizado en 1537 a Alonso de Berruguete por el banquero Don Diego de la Haya y su esposa Doña Catalina Barquete. El discurso iconográfico del retablo representa la Encarnación, el Nacimiento y la Adoración de los Reyes Magos al Niño Jesús. En la predela están representados, arrodillados en actitud orante, los donantes del retablo, que son presentados al Salvador por San Juan Bautista y San Juan Evangelista.