Un artículo de opinión de Alfredo Vallejo
La mejor definición de “infierno” que yo conozco , seguramente, es de Jean Paul Sartre cuando afirmó :”El infierno son los demás”. Pero … ¿no se puede afirmar así mismo que “el cielo son los demás?. Creo que sí; el pesimismo de Sartre sólo es la mitad.
No es infrecuente; la bondad de muchos, de mucha gente sencilla y anónima, de muchos seres humanos corrientes, de muchos que no son noticia, nos hace mirar el mundo con optimismo y confianza. A pesar de todo.Hace no muchos días en este periódico apareció la noticia de que la Asociación del Padre Angel Olaran llegaba a su fin por el envejecimiento de sus miembros, mujeres casi todas, cargadas de años, y sobre todos de amor por los demás.
Gracias porque habéis hecho tanto bien con vuestro esfuerzo, en colectas, rastrillos, rifas, donaciones… El proyecto misionero del P. Ángel Olaran en Etiopía seguirá adelante, es una realidad consolidada.
En esta Soria pequeña, humilde, en esta tierra sin gente apenas, ha surgido, de nuevo, un grupo de hombres y mujeres que arropando y ayudando con amor y esfuerzo a “otro Padre Angel”, el cura de Camaretas, de alguna manera siguen los pasos de esta gente buena de sorianos y sorianas que durante muchos años ayudaron a dar de comer, dar cobijo, educación, atender a muchos pobres de Etiopia.
Hoy el Padre Ángel de Soria, desde la parroquia de Camaretas, ayuda a muchos desheredados, pobres, reclusos recién salidos de la cárcel, gente con necesidad. En el país centroamericano de El Salvador colabora muy activamente en ayudar a una población, sobre todo infantil, que carece de lo más elemental, en medio de un medio social hostil y peligroso. Escuela, hospital, comedor y acogida. El amor siempre resurge. “El cielo también son los demás”.