Los usuarios lamentan que ni el Ayuntamiento de la capital ni la empresa haya tomado medidas para evitar que durante la mañana de hoy los trabajadores hayan acudido a auxiliar a los dependientes “como un día normal”.
Las aristas de la crisis del COVID-19 son infinitas. En la mañana de hoy varios lectores han informado a este medio que los servicios sociales de ayuda a domicilio de la capital están prestando sus servicios con normalidad y sin tomar las precauciones básicas para evitar el contagio del coronavirus. Estos trabajadores ayudan a realizar tareas básicas a los dependientes, desde levantarse de la cama, vestirse, el aseo personal…
La comisión del consistorio acordó el pasado viernes que estos servicios siguieran prestándose, pero la sorpresa de los familiares ha sido al conocer que no se están tomando medidas higiénicas de precaución. Los propios familiares señalan que la empresa que presta los servicios, Aralia, reconoce no disponer del material necesario y que la alternativa que ofrece es que sea el usuario quien cancele el servicio.
Una usuaria se muestra “muy indignada” al señalar que, a su madre, “una persona mayor”, hoy la han atendido “igual que todos los días, sin tomar ni una sola medida de precaución”.
Desde el Ayuntamiento de la capital, el concejal del ramo Eder García, señala a este medio que en la jornada de hoy se ha requerido a la empresa la adopción de medidas y que el consistorio está buscando material para poder proporcionárselo a estos trabajadores ya que hay servicios a algunos usuarios “Que no se pueden suspender”.
El consistorio ha trasmitido a la empresa esta mañana por escrito un requerimiento para que tomen las medidas oportunas e instando a la empresa a suspender el servicio si no puede proporcionarlo. “Les hemos pedido que nos remitan el protocolo y la organización para las próximas semanas” explica García a Soria Noticias.
El concejal recuerda que es un servicio que presta una empresa y que como tal es su responsabilidad ofrecerlo en unas “condiciones de seguridad tanto para los dependientes como para los trabajadores”. “Les hemos señalado que lo que están haciendo no se puede permitir” explica Eder que ha dado orden de suspender todos los servicios asistenciales que no sean imprescindibles.
“Desde ya se suspende todo lo que no sea imprescindible y se dejarán los servicios básicos” explica. La empresa junto a los CEAS del consistorio evalúa “uno por uno” los cerca de 400 casos para decidir qué asistencia debe seguir prestándose.