Diariamente, solo está trabajando presencialmente en Correos una media de 11.640 personas (aproximadamente el 22% de la plantilla), el mínimo imprescindible para garantizar la prestación del servicio público a todos los ciudadanos y empresas de España. Las oficinas solo abren de 9:30 a 12:30 horas para atender a los clientes que necesitan utilizar el servicio postal público. Se ha cambiado la operativa para eliminar el contacto entre personas y se están siguiendo todas las medidas preventivas indicadas por las autoridades sanitarias para proteger a trabajadoras, trabajadores y clientes
Desde la publicación del Real Decreto 463/2020, de 14 de marzo, por el que se declara el estado de alarma para la gestión de la situación de crisis sanitaria ocasionada por el COVID-19, la empresa pública postal trabaja para garantizar la prestación del Servicio Postal Universal (SPU) tal y como tiene encomendado.
Por tanto, Correos "solo presta el servicio postal público obligatorio, con el personal mínimo imprescindible para garantizárselo a todos los ciudadanos y empresas de España", afirma en una nota distribuida a los medios. Para ello, ha reorganizado su operativa y ha implementado nuevos protocolos de actuación que permiten asegurar la continuidad del servicio público, protegiendo al mismo tiempo, y de manera prioritaria, la salud de sus trabajadoras y trabajadores, y de sus clientes.
El resultado de estas medidas es que la semana pasada trabajaron presencialmente en Correos una media diaria de 11.640 personas (oficinas, reparto, centros logísticos, oficina de cambio de Barajas y sedes administrativas de toda España), lo que supone, aproximadamente, el 22% de la plantilla total de la empresa postal pública (53.041 empleados).
En la red de 2.395 oficinas postales presentes en toda España, se atendió a una media diaria de 72.000 personas, frente a las 300.000 personas que habitualmente se atendían cada día en las oficinas de Correos antes del Estado de Alarma. Hay que reseñar que el día 19 de marzo fue festivo en la Comunidad Autónoma de Valencia, Región de Muria, Galicia y País Vasco.
La gran mayoría de las operaciones correspondieron a servicios de necesidad: principalmente el envío de dinero mediante giros postales, que han experimentado un crecimiento de 7,32 puntos porcentuales respecto al volumen de giros que se que se gestionaba antes de la crisis del COVID19) y los paquetes entre particulares (paquete Azul, paquete nacional de hasta 20 Kgs.), ambos servicios enmarcados dentro del Servicio Postal Universal.
Las oficinas de Correos están abriendo de 09:30 a 12:30 horas, de lunes a viernes, con el personal mínimo impresindible para atender a los ciudadanos que necesitan utilizar el servicio público.
Se recuerda a todos los usuarios que deben restringir sus desplazamientos a las oficinas postales solo para las gestiones realmente necesarias. Se están aplicando todos los protocolos dictados por las autoridades sanitarias en cuanto a mantener la distancia entre personas y lavado de manos de los empleados.
En reparto, solo está operativo el personal estrictamente imprescindible para la prestación del servicio postal público obligatorio, único servicio que se está desarrollando. Se ha suspendido el turno de tarde y el reparto en sábados.
También se ha cambiado la operativa para eliminar el contacto entre personas. Se ha suspendido la recogida de firmas en PDA.
Todas las actividades de Correos se están desarrollando "siguiendo las instrucciones emanadas del Ministerio de Sanidad, para preservar la salud de los trabajadores y clientes".
Cuando se ha detectado un caso (confirmado, posible o probable, según la clasificación del Ministerio de Sanidad) en un centro de trabajo, "se está aplicando el protocolo establecido: cuarentena de los trabajadores, cierre y desinfección del espacio físico y reapertura con un equipo de trabajadores diferente para preservar la prestación del servicio postal público obligatorio".
Correos quiere "agradecer una vez más la responsabilidad de todos sus trabajadores y trabajadoras que están demostrando día a día su compromiso con la prestación del servicio postal público en estos momentos críticos para la sociedad española".
En caso de ser necesario, Correos volverá a adaptar su operativa en función de las circunstancias.