Una mujer de la travesía Teatinos de la capital soriana ha salvado la vida de uno de sus vecinos, de 80 años y víctima de un accidente doméstico.
Cada tarde, a las 20:00 horas, Soria sale a las ventanas y balcones para dedicar el más sentido aplauso a aquellos que dedican su esfuerzo diario para cuidar de los demás. Intentamos acordarnos de todos pero hay muchos héroes que pasan desapercibidos y no acaparan focos y flashes. Hoy les traemos una de estas historias. Ejemplos que salvan vidas y que sacan a la luz lo mejor de la sociedad soriana.
Nuestra protagonista es una mujer que prefiere mantener el anonimato. El único dato que permite hacer público es su residencia. Ella vive en la travesía Teatinos de capital y esta mañana ha tenido una corazonada. Su intuición le ha dicho que algo no iba bien. Uno de sus vecinos, de 80 años, no ha levantado las persianas ni tampoco ha abierto las ventanas para ventilar. Una llamada telefónica parecía la solución perfecta para desactivar la angustia en el estómago pero no ha obtenido respuesta.
Esto no encajaba en el comportamiento de su conocido y la llamada a la Policía Local ha sido obligada. Después de varias gestiones, los agentes han decidido llamar al juez de guardia y los bomberos. Los profesionales han accedido a la vivienda a través de uno de los balcones y han comprobado que la persona se había caído en una habitación de la casa y no podía moverse. Una ambulancia medicalizada le ha trasladado al hospital y, afortunadamente, se encuentra bien.
Hoy, una heroína anónima ha salvado una vida y ha demostrado la efectividad de cuidarnos un poquito entre todos.