Sigue habiendo casos pero son "aislados e identificables". Según Verónica Casado, el Ministerio de Sanidad "nos ha animado a pedir el cambio de fase a la vista de los buenos datos epidemiológicos y sanitarios".
La consejera de Sanidad de Castilla y León, Verónica Casado, acaba de anunciar en rueda de prensa que Castilla y León solicitará al Gobierno que todo territorio de la Comunidad pase a Fase 3 el próximo lunes 15 de junio.
Este cambio de fase se solicita tan solo un día después de que el grueso de Castilla y León entrase en Fase 2 y significaría que la comunidad ascendería de fase con tan solo 7 días de diferencia. Es decir, de concretarse el ascenso de fase, no se esperaría a la quincena para comprobar el desarrollo de la epidemia, algo que siempre se había defendido desde la Junta en base a la tan repetida prudencia.
Casado ha explicado esta decisión apoyándose en que "hemos venido monitorizando los datos epidemiológicos y sanitarios y la evolución de la pandemia es muy buena. El Covid-19 sigue entre nosotros pero los datos son aislados e identificables". Además, ha recalcado la consejera, "el Ministerio nos ha animado" a dar este paso.
Aún así, la consejera ha insistido en la responsabilidad individual para evitar el rebrote.
Se están estudiando una serie de limitaciones para algunos territorios en la futura Fase 3. "Los expertos están estudiando estas limitaciones y podrían ser de ocio y movilidad", ha referido la consejera.
Una movilidad que, según ha aclarado Casado, no será en ningún caso entre distintas Comunidades. "La movilidad interprovincial dependerá de los expertos pero por todos es sabido que hay provincias que llevan días sin registrar casos y otras que tienen una evolución peor", ha concluido la consejera.