El agredeño, arzobispo de Zaragoza, visita el templo de la Virgen de los Milagros para dar ánimos a la parroquia e insistir en la confianza en Dios ante estos momentos que siguen siendo difíciles.
Este domingo, el arzobispo de Zaragoza, el agredeño Vicente Jiménez Zamora giraba visita a su localidad natal y enviaba unas palabras a sus paisanos en la misa dominical celebrada en el templo-santuario de Nuestra Señora de los Milagros.
A la conclusión de la ceremonia Jiménez Zamora se refería a la presencia de Dios en el dolor que ha provocado la pérdida de seres queridos a causa del virus, y aunque existe el miedo a la epidemia es preciso tener confianza y esperanza. Esta última "es el motor de la existencia", por lo que ha invitó a mantener y reafirmar la fe ante estos momentos difíciles.
También hacía referencia a la dureza que ha supuesto el azote de la pandemia, la cual, pese a que en Ágreda no ha tenido una gran virulencia, en otros lugares el drama se ha dejado notar con intensidad, y sobre todo en el momento de despedir, en soledad, a quienes han fallecido por la infección.
Por otro lado, el prelado también aletnó a colaborar con la parroquia en los actos del 75 aniversario de la Coronación canónica de la Patrona de Villa y Tierra, una efeméride que tendrá lugar en 2022 y para la cual se mostraba seguro de que los fieles apoyarán la celebración de esta efeméride, con el mismo éxito con el que se han desarrollado las fiestas de Los Milagros pese al confinamiento.