El veterano central de Alparrache seguirá con la elástica celeste al menos una temporada más.
Alberto Salas continuará otra temporada más en el Río Duero. El veterano jugador de Alparrache cumplirá este este verano 36 años, y lo hará sabiendo que los vivirá siendo celeste una vez más. Junto a Manu Salvador, son los únicos jugadores que conocen lo que es el Río Duero de voleibol desde su nacimiento y para la temporada la temporada 2020/2021, es el sexto jugador soriano de la plantila del club.
Poca presentación necesita el histórico central soriano. Nacido el 13 de Septiembre de 1984, debutó con el CD Numancia en 2001 y ha jugado para los clubes de Soria todas las temporadas de su carrera, a excepción de las 2010/2011 y 2011/2012, en las que formó parte del CV Almería.
Su nombre está escrito entre los mejores jugadores de Superliga española, lo que llevo a ser convocado por la Selección Española absoluta con la que disputó numerosos campeonatos internacionales.
Con su renovación, el Río Duero da por finalizada la plantilla y no baraja ninguna incorporación más para el próximo curso. Una plantilla muy completa y que ilusiona, pero que tendrá que trabajar mucho para conseguir sacar adelante la temporada 20/21, la cual se presenta apasionante a la vista de los fichajes que se están anunciando por parte de todos los clubes de Superliga.
Tanto en la afición como en el club están ansiosos de que arranque la pretemporada y poder ver a todos estos grandes jugadores pisar el suelo de Los Pajaritos, para que todo esté preparado a principios de octubre, fecha en la que presumiblemente dará inicio el calendario.
Para el técnico, Manuel Sevillano es "estupendo que Salas siga con nosotros”. Es una persona que siempre ayuda y siempre suma. Por su trabajo, no puede hacer temporadas completas, pero cuando viene da todo lo que tiene sin pedir nada a cambio y sin ninguna queja”.
“Hemos compartido muchísimos años de vóley, en Soria en Almería y en la Selección. Es mucho más que un compañero y por eso estoy tan contento de que siga en el equipo. Aún nos quedan cosas bonitas por vivir en el Río Duero, y Salas tiene que estar en ellas y poder disfrutarlas desde dentro”, ha confiado.