Las lesiones de Gus Ledes, Alex Sola y Marc Mateu condicionan el tramo final de un Numancia que luchar por agarrarse al fútbol profesional.
La plantilla del Club Deportivo Numancia era extremadamente corta. Se trata de un secreto a voces desde el pasado verano que la actual situación ha dejado en evidencia… justo en el peor momento. Las malas decisiones en cuanto a la planificación deportiva del club van desde el logro de cesiones que parecían deslumbrantes y que apenas han tenido impacto en el juego (Otegui, 0 goles, 0 asistencias y solo 806 minutos jugados y Zlatanovic, 0 goles, 1 asistencia y solo 421 minutos) a la extraña situación de Aguado (tal y como informa Luis Romera en Diario AS el jugador ha regresado a Valladolid después de que el club rojillo no haya querido pagar por su cesión en Julio).
Eso nos lleva a una plantilla extremadamente corta y obliga a Carrión a contar con numerosos jugadores del filial sentados junto a él en la mayoría de los partidos. Tampoco ha beneficiado nada al club rojillo que con la crisis de covid y la reanudación exprés de la competición se haya ampliado el número de cambios y de jugadores convocados. No son pocos los encuentros en los que Luís Carrión se ha quedado lejos de gastar las 5 sustituciones permitidas.
La alta carga de minutos ha terminado provocando una oleada de lesiones para un equipo en situación crítica. Gus Ledes, uno de los numantinos con más minutos, anunciaba hoy en twitter su baja para el resto de la campaña. Por su parte Alex Sola sufre una rotura del ligamento cruzado anterior por lo que también dice adiós a la temporada. Lesión muscular también para Marc Mateu que se rompió en la primera parte del último partido. La del capitán parecía en directo más una lesión muscular que una lesión importante, pero con el calendario tan apretado cualquier lesión puede suponer decir adiós a la temporada.