La Consejería de la Presidencia convoca, en los meses de julio y agosto, 18 procesos selectivos que corresponden a convocatorias pendientes de 2017 y 2018, para dar cobertura a un total de 382 plazas. Las convocatorias de cuerpos especializados se revelan como una oportunidad para retener el talento a través de la creación de un cuerpo de jóvenes opositores que encuentren en Castilla y León la oportunidad para desarrollar su profesión.
Hoy se han publicado en el BOCYL los 8 procesos selectivos aprobados para el mes de julio, que sumados a los dos que saldrán a lo largo de esta semana, suponen un total 10 procesos con 234 plazas, de las cuales 79 corresponden a tasa de reposición y 110 de estabilización, todas ellas repartidas entre agentes medioambientales, escala de archiveros, ingenieros superiores en telecomunicaciones, cuerpo superior de administración económico financiera, ayudantes de biblioteca, cuerpo superior, escala de bibliotecarios; en promoción interna corresponden a 30 para cuerpo de gestión y 15 para cuerpo de gestión económico financiera.
Además de esta convocatoria, están pendientes de convocar en el mes de agosto 8 procesos selectivos, con un total de 148 plazas, de las cuales 23 corresponden a tasa de reposición y 60 de estabilización, todas ellas repartidas entre sanitarias, ingenieros de caminos, ingenieros de minas, ingenieros técnicos de minas, especialistas en empresa y cuerpo de gestión; en promoción interna corresponden a 5 para cuerpo superior económico financiero y 60 para cuerpo administrativo.
Estas convocatorias vienen a completar los procesos pendientes de 2017 y 2018. “Con ellas damos un paso en el compromiso de reponer los puestos que han ido quedándose vacantes en la Administración pública y que son esenciales para prestar los servicios que la Comunidad autónoma tiene encomendados”, explica el consejero de la Presidencia.
Destacan de forma notable en estos procesos las convocatorias de plazas para cuerpos especializados, una oportunidad de retener el talento de jóvenes cualificados que puedan pasar a formar parte de la Administración autonómica, para dar mayor cobertura a la prestación de unos servicios públicos competitivos y de calidad.
“Nuestra intención es trabajar en la retención de talento en la Administración y, de esta forma, vamos modernizando la función pública desde la base, impulsando un cuerpo de jóvenes opositores que vean en la Administración una forma de desarrollar su carrera profesional y en Castilla y León el lugar idóneo para encontrar una oportunidad de empleo especializado, estable y de calidad”, señala Ibáñez.