Con esta medida se suma a la adoptada por varias residencias públicas y privadas de la capital y provincia para extremar la vigilancia de los residentes por miedo a un rebrote. Afecta a las residencias de El Burgo de Osma y Ágreda.
La residencia de San José de El Burgo de Osma y Nuestra Señora de los Milagros en Ágreda, han prohibido de nuevo las visitas de familiares a los ancianos y residentes ante un posible rebrote.
La vicepresidenta segunda de la Diputación provincial, María José Jiménez, ha explicado que la situación “en nuestros centros está controlada, y que las residencias seguirán desarrollando análisis periódicos para descartar posibles contagios. La decisión se ha tomado con el objeto de controlar los casos y poder tomar decisiones a tiempo. El temor a que el virus vuelva a entrar endurece el aislamiento”
Con precaución y siguiendo las directrices sanitarias la institución se suma a las medidas del protocolo establecido en la “Guía de actuaciones en las residencias y centros de día públicos y privados de personas mayores o con discapacidad de Castilla y León para los centros de la capital. De esta forma, el centro residencial de El Burgo de Osma, ha suspendido las visitas desde el miércoles y el municipio de Ágreda desde ayer.
“Como medida preventiva del virus o su propagación”, ha reiterado Felipe Utrilla, diputado encargado de la gestión de las residencias. La medida también afecta a los usuarios que estarán sometidos a un control estricto. Asimismo, se realizará una evaluación de todas las personas que entran a los centros.
Los residentes de ambos centros vuelven a partir de hoy a recibir la visita de sus familiares vía telemática. En la práctica supone un endurecimiento del protocolo de desescalada para residencias que se estableció tras la finalización del estado de alarma.
En dicho protocolo se establecía que el régimen de visitas debía ser con cita previa, y cada residente recibía una visita de un solo familiar. El tiempo de la visita era de hasta una hora y se permitía la salida controlada de los residentes siempre que, a su regreso se extremara la desinfección. “Ahora y hasta que la situación mejore estas medidas quedan prohibidas”, ha puntualizado María José Jiménez. Por otro lado, se mantienen el resto de medidas como la toma de temperatura y el uso obligatorio de gel y guantes.