Es una edificación perteneciente a la red de construcciones musulmanas del siglo X en la línea del Duero.
La delegada territorial de la Junta de Castilla y León, Yolanda de Gregorio, ha visitado esta mañana Nograles, localidad del municipio de Recuerda, donde la Consejería de Cultura y Turismo está ejecutando, con un presupuesto total de 56.740 euros y un plazo de ejecución previsto de dos meses, las obras de consolidación de la atalaya.
Junto a la delegada, han conocido el estado de las obras la alcaldesa de Recuerda, Consuelo Barrio; el teniente de alcalde y presidente de la pedanía de Nograles, Clemente Martínez; el jefe del Servicio Territorial de Cultura y Turismo, Carlos de la Casa; y técnicos de Patrimonio y representantes de la empresa encargada de la ejecución.
La intervención en la atalaya de Nograles prevé la consolidación, refuerzo y reconstrucción necesarios para la conservación y el mantenimiento de la estabilidad de la atalaya y del palomar que lo rodea, recuperando las fábricas de mampostería y los restos de cubiertas existentes. Se lleva a cabo aplicando el principio de mínima intervención, manteniendo en la medida de lo posible elementos y materiales originales.
Para lograr dichos objetivos se ha programado el apeo de las construcciones, la limpieza y retirada de escombros y la demolición de la actual cubierta en ruina para poder rematar las cabezas de los muros. También se coserán las grietas estructurales abiertas; se repondrá el material pétreo perdido; se fortalecerá con codales para evitar el movimiento de las zonas más débiles; se picarán, limpiarán y rejuntarán las fábricas originales y se realizará una reconstrucción parcial de la cubierta. Por último, se completará la estructura radial de arriostramientos de madera entre atalaya y palomar.
Estas obras fueron adjudicas a la empresa Francisco Ruiz Cano, S.L.U., por una cuantía de 48.274 euros, y la redacción de documentación técnica, dirección de obras, coordinación de seguridad y salud y redacción de memoria final de esta intervención al arquitecto Julián Gallardo, por un importe de 8.470 euros. La actuación cuenta con financiación de los fondos FEDER (Fondo Europeo de Desarrollo Regional) y está coordinada por el Servicio Territorial de Cultura y Turismo.
Atalaya de Nograles
La atalaya de Nograles es una edificación perteneciente a la red de atalayas musulmanas del siglo X en la línea del Duero, dentro de la provincia de Soria, que constituía la frontera natural entre los reinos cristianos del norte y el califato musulmán al sur.
El impulso de repoblación de los cristianos supuso el refuerzo de este sistema defensivo musulmán, con la edificación de fortificaciones en las que aparecen estas construcciones como torres de vigilancia en las rutas y de comunicación entre las fortalezas más importantes.
La atalaya se encuentra ubicada al borde del casco urbano, en una zona poco elevada, y encerrada por un palomar que lo circunda, dos características poco habituales de este tipo de atalayas. Con planta de forma circular, tiene un diámetro de unos tres metros y conserva su acceso elevado a la altura del primer piso. Su altura es de unos 10 metros, aunque la zona superior se remozó para realizar la cubierta del palomar, y sus fábricas son de sillarejo trabado con mortero de cal.
En el transcurso del tiempo la atalaya ha sufrido modificaciones y adaptaciones que han contribuido a su conservación y mantenimiento hasta nuestros días. Sin embargo, el abandono de las labores tradicionales del medio rural ha propiciado su actual situación de dejadez y su mal estado constructivo, más evidente en el palomar que en la propia atalaya, lo que apremiaba una adecuada labor de consolidación.