Empresarios de instalaciones deportivas y usuarios se han concentrado en Mariano Granados para exigir a la Junta que les permita reabrir sus instalaciones. Gritan que: "Deporte es salud".
El pasado viernes 6 de noviembre cerraron todos los centros deportivos de Castilla y León como medida impuesta por la Junta de Castilla y León para evitar el avance del coronavirus. Una bajada de persiana obligada que está suponiendo una auténtica soga al cuello para un sector muy castigado desde la primera ola de la pandemia.
Esta mañana se ha concentrado la Asociación Soriana de Empresarios de Instalaciones Deportivas en Mariano Granados para exigir a la institución regional que reconsidere su decisión. Usuarios de estos centros han decidido acompañar a un sector que, reivindican, "no es el problema, sino parte de la solución", pues afirman que "cuando la gente practica deporte mejora su sistema inmunológico y esta es la mejor manera de combatir el virus".
"Tan solo un 0,28% de los contagios se ha producido en centros deportivos. Nosotros hemos cumplido a rajatabla todos los protocolos y medidas de seguridad y no entendemos cómo ahora nos cierran", explica Jesús Corchón, presidente de la Asociación.
Respecto a las ayudas que se vienen anunciando para compensar el cierre, Corchón señala que "los créditos hay que devolverlos. Lo único que nos salvaría son ayudas a fondo perdido pero la mejor ayuda que pueden darnos es dejarnos trabajar".
Permitir que la actividad regrese a los 15 centros deportivos de la capital (a los que se suman los clubes deportivos) podría rescatar a "todo el empleo del sector que ahora mismo se encuentra en ERTE" y que ahora pende de un hilo pues "no aguantamos ni un minuto más cerrados", insiste Corchón. Sin olvidar que volver al deporte mejoraría la salud física y mental de "los 7.000 usuarios que existen en Soria".