Una placa de hielo cubre numerosas aceras y carreteras de la ciudad de Soria. Circular por la calzada es la mejor solución en algunos tramos, pero debe hacerse con mucho cuidado. Algunos puntos de la ciudad presentan bonitos y peligrosos chupones de hielo.
Las horas de admiración, fotos y juegos con la nieve han acabado. Y ahora vienen días, muchos días, de resbalones, incomodidades y algún que otro susto. Soria amanece este lunes 11 de enero tranquila y a ello contribuye en buena parte la suspensión de las clases para hoy por parte de la Junta de Castilla y León.
En la capital de Soria, a eso de las 8 de la mañana, la situación era la siguiente: Las principales carreteras de la ciudad están limpias, aunque la cosa cambia si entramos en calles secundarias. En las aceras pasa algo similar, en las más transitadas hay senderos realizados por el personal de limpieza mientras que la mayoría están cubiertas por una capa de unos 5 centímetros de hielo que puede o no estar cubierta por la nieve.
Así las cosas, la recomendación para el día de hoy es no salir de casa si no es imprescindible y en el caso de hacerlo llevar la máxima precaución posible. Los resbalones son habituales en las zonas más sombrías y en las cuestas, que en esta ciudad son mayoría. Además del calzado adecuado muchos sorianos apuestan por ir por la calzada, en mejores situaciones que la acera, lo cual es una solución ‘de toda la vida’ que obliga a tener especial precaución con los vehículos y a ir muy atento para no hacerles frenar. Recuerda, el hielo no siempre se ve.
Afortunadamente en Soria lo de que cada uno limpie su tramo de acera es algo arraigado en nuestro ADN y no genera tanto debate como en otros lugares. Pero aparte del suelo el viandante debe tener un ojo puesto en los tejados. En paseo matutino por las calles del centro se pueden ver numerosos chupones de hielo que pueden dar más de un susto en caso de romperse.
Están sobre todo en salidas de agua, terrazas y balcones y en los puntos más conflictivos el Ayuntamiento ha precintado las aceras para evitar desprendimientos. Es el caso de la Audiencia Provincial donde las gárgolas que alejan el agua de la pared lucen espectaculares o el instituto Machado. Como decimos la mayoría están señalizados, pero ojo, hay algunos que no lo están. También hacia arriba hay que mirar por los posibles derrumbamientos de nieve desde tejados y cornisas
Ah, y una última recomendación, entre tanto guante, botas y gorros no se olvide de la mascarilla. No vaya a ser que le pase como a mí y tenga que volver a casa.