El Numancia vuelve a perder, y esta vez en el campo del colista Marino Luanco, que ha ganado 1-0 a unos rojillos, que no podían fallar este sábado. Y continúa la sangría, con cinco partidos seguidos perdidos fuera de casa sin marcar. El Numancia ha dado una imagen pésima, con un mal partidos, con un par de remates en la puerta contraria, que no han dado ningún problema al portero asturiano.
El Numancia tenía que ganar ante el Marino Luenco, un equipo -a priori- muy inferior, que la pasada temporada peleó por el mantenimiento en la categoría de Segunda B. La situación es dura, y se le ha complicado al Numancia estar arriba para luchar por el ascenso. Pero lo peor, más allá de la derrota, es la pésima imagen dada por el Numancia, la forma de perder.
El Numancia no ha entrado en el partido en los 95 minutos, en el que el Marino ha llevado el juego a su terreno. El Numancia no ha estado rápido, no ha tenido las ideas claras, y la prueba es que lo único que ha hecho ha sido tirar un par de veces a puerta, sin peligro para el guardameta asturiano. Que no haya nada que contar del juego de los sorianos, lo dice todo.
El gol de Marino de Luanco ha llegado después de un corner a favor del Numancia, que ha provocado un contraataque rápido del Marino por el carril izquierdo, y ha terminado un disparo del exnumantino Alex Arias, sin que apenas ángulo ha llevado el balón a la red de la puerta numantina. Ha sido un único detalle -porque el trabajo ofensivo de los asturianos también ha sido nulo- que ha tenido de premio tres puntos. Los asturianos han estado mucho más motivados, se han defendido muy bien, y han sabido hacer el gol que necesitaban.
Además, el portero Ximo Miralles ha provocado un penalti para evitar un disparo del contrario, que llevaba camino de terminar en un segundo gol. Afortunadamente, lo ha parado y ha impedido un resultado más abultado, que habría empeorado la imagen del Numancia.
Se da la circunstancia de que el Marino jugaba con un nuevo entrenador, Manel, que también ha entrenado a Numancia. No ganar este sábado supone un serio fracaso, porque aunque los equipos están con una puntuación muy ajustada, esta derrota aleja al Numancia del objetivo de lugar por el ascenso a Segunda. El Numancia no ha sabido adaptarse a la forma del jugar del Marino.