Soria Noticias entrevista a Mercedes Mola Ibáñez, catedrática emérita de geografía humana de la Universidad Complutense de Madrid. Molina es la autora de buena parte de la base académica de la lucha contra la despoblación, un campo que lleva investigando y trabajando desde hace más de 25 años. Orgullosa de que su trabajo sirva para revertir la situación de Soria es optimista, pero realista: “Hoy todavía es posible, mañana será tarde”.
P ¿Qué supone el cambio en el reglamento de los fondos FEDER? Es un antes y un después, un punto de partida, un granito más en el granero… ¿Cuánto de importante es?
R: La modificación de dos artículos del Reglamento del FEDER, implica que los fondos llegados a España por esta vía europea, anteriormente administrados por el Estado o las CCAA, (NUTS 1 o 2), ahora, una parte de esos Fondos que decidirán los Estados, debe orientarse a inversiones en Unidades Administrativas menores , caso de Provincias (NUTS 3) o Locales agrupadas (LAU). Deben cumplir unos criterios demográficos, tales como: una densidad de población inferior a 12,5 hab./km2, para áreas escasamente pobladas o por debajo de 8 hab./Km2 para áreas muy escasamente pobladas , o una disminución promedio de la población de más del 1% entre 2007 y 2017 .
Por primera vez en la historia del FEDER, una parte de sus Fondos tiene un carácter específico de aplicación en Unidades Territoriales menores que las tradicionales, para corregir aquellos problemas que han determinado su actual situación. Siempre han sido los Estados o la Regiones los territorios referenciados, a este respecto recuerdo el artículo 174 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea (TFUE), que establece que debe prestarse especial atención a las REGIONES que padecen desventajas naturales o demográficas graves y permanentes, no a unidades territoriales menores. Podíamos citar Reglamentos y artículos sustentados en dichos territorios y cuando se consideraba lo local o provincial en acciones como las ITIs o el Desarrollo Local participativo, en el periodo 2014-2020, sus requisitos eran tan complejos que apenas han tenido significación y eficiencia. El logro ha sido importante, esperemos que se ejecute bien y de forma coordinada.
P: ¿Es suficiente la definición que hace la UE de la despoblación? ¿Le parece acertada?
R: A mi juicio y tal como yo entiendo la despoblación, diría que es parcial, ya que, como explicaré después, es algo más que un problema demográfico. Se ha seguido el mismo criterio solo de población, aplicado a los territorios escasamente poblados, por encima del paralelo 60 de la Unión Europea, aunque sus procesos han sido muy diferentes y no son comparables. Teniendo en cuenta que la UE determina tipologías territoriales, sobre unos indicadores o variables muy simples, la densidad de población no deja de ser un criterio, que al menos individualiza territorios y por primera vez los considera destinatarios de unos fondos específicos.
El mayor problema radicaba en la elección de la Unidad Territorial de referencia, para determinar esa densidad y por ello una significación en el destino de sus fondos. No es lo mismo tomar como referencia la” Región”, territorio menor que el Estado, según la UE , que la “Provincia” o el “Municipio”, circunstancia que siempre he considerado en mis investigaciones como problema. La dinámica de crecimiento seguida por la Ciudad y sobre todo por las Grandes Ciudades, caso de los Sistemas Metropolitanos, ha enmascarado muchos problema, no solo demográficos. De ahí nuestro interés por significar que al menos un proceso grave, el de la progresiva despoblación territorial, se midiera en Unidades Territoriales menores, para visibilizarlo y comprometer parte de la inversión. Curiosamente el Programa Marco de 1994-99, identificó ya este proceso, señaló la problemática situación de Soria, junto a otras provincias de la España interior, y recomendaba a las CCAA que aplicaran Fondos FEDER, en estos territorios especialmente en Infraestructuras, Medioambiente y Patrimonio. Recuerdo que algunas eran importantes receptoras, como Castilla y León por ser entonces región de objetivo 1, dado su bajo nivel de renta. ¿Se cumplió esta recomendación? Pueden contestar los lectores, a tenor de lo invertido en la provincia de Soria.
P: Viendo el mapa que maneja el Ministerio para el reto demográfico con los territorios con menos de 12,5 habitantes por km cuadrado y los que pierden un 1% anual se marca prácticamente la totalidad de los municipios españoles. ¿Se corre el riesgo de que esto vuelva a ser un coladero o un café para todos?
R: Si somos objetivos es la realidad que tenemos y no la podemos ignorar. He estudiado en profundidad la despoblación en sus causas y en sus consecuencias y el mapa resultante a nivel local, es muy preciso. Sus principales causas se relacionan con la progresiva configuración en el Reino de España, como en otros países europeos, de un modelo territorial de concentración de la inversión, del empleo, del valor de la producción y por ello de la población, cuando se consolida el paso de una economía de fuerte base agraria a otra industrial y de servicios. La ciudad adquiere una nueva dimensión, es el territorio de la eficiencia económica, asociado a economías de aglomeración y de escala. Este modelo de organización territorial, se vincula estrechamente con un modo de producción de crecimiento intensivo de corto plazo, sustentado en el Producto Interior Bruto (PIB), empleo y renta, para analizar su dinamismo. Sus resultados podían ser muy positivos a escala de Estado o Región, pero no ponían de manifiesto las grandes diferencias internas.
Unas variables o indicadores que han ignorado otros costes, asociados a ese crecimiento y cuando los incorporamos, caso de los ambientales, (ya señalados en el INFORME BRUNDTLAND EN 1987), los sociales o los territoriales, ya muy visibilizados por sus graves efectos reforzados incluso por la pandemia, tenemos que aceptar sus fallos y problemas. Esta dualidad modelo territorial y modo de producción, fue responsable de una emigración continua y forzada, desde las zonas rurales y ciudades intermedias, a las grandes regiones urbanas, mayormente desarrollada en el caso español en la década de 1960. La descapitalización humana, ha ido unida a la progresiva configuración de una brecha de competitividad territorial cada vez mayor, por falta de inversión, asociada en ocasiones a políticas públicas desequilibradoras. No hay que olvidar que el sector primario ha generado una gran riqueza y ha sido el motor de numerosas industrias y servicios, pero fuera de los territorios de su producción básica.
Por ello, tenemos que ser conscientes de su dimensión territorial real, pero también de que unos territorios han sufrido en mayor medida las consecuencias, la provincia de Soria es uno de ellos y espero se tenga en cuenta. No obstante, la modificación del FEDER abre una vía trascendental para determinar desarrollos rurales diversificados, a partir de contextos comarcales funcionales y por supuesto con servicios jerarquizados que permitan ir determinando una verdadera equidad social, que ahora no existe. Ello también requiere trabajo local y modelos de provincia y de territorios rurales con perspectiva de futuro, que sean configurados por un gran consenso sociopolítico. La situación actual es FRUTO DE TODOS y la solución debe ser COMPROMISO Y TRABAJO DE TODOS, NO OLVIDEMOS QUE EL PASADO ESTÁ HECHO, PERO EL FUTURO NO.
P: Usted decía hace unas semanas que le habían dicho en muchas ocasiones que lograr esto era imposible. ¿Puede resumirnos cuál ha sido el proceso?
R: Se inició en el año 2015 y ha culminado en el 2020. El Alcalde de Soria, Señor Martínez Mínguez, conocedor de mis investigaciones, me solicitó un informe que titulé: LA DESPOBLACIÓN TERRITORIAL EN LA UNIÓN EUROPEA: DE LA CRISIS PRESENTE A LA OPORTUNIDAD FUTURA.
Su principal objetivo era demostrar como la convergencia social, económica y territorial que consideraba el Tratado de Lisboa de 2009, determinada por las políticas de cohesión y de inversión territorial europeas, habían logrado sus objetivos pero parcialmente. Nunca negaré los beneficios externos e internos de la UE, que han sido enormes y yo soy una europeísta convencida, sin la UE no seríamos nada, pero quería poner de manifiesto que la convergencia lograda a nivel de Estado y de Regiones, a partir de la evolución positiva de la renta per cápita, en absoluto reflejaba lo mismo, medida a nivel de provincia o municipio. La Despoblación era el paradigma de la persistencia de los desequilibrios territoriales y de la falta de cohesión social.
Eso necesariamente había que visibilizarlo y modificarlo, máxime cuando ya se estaban discutiendo los objetivos de los presupuestos post 2020.Dicho documento lo presentamos en Nicosia en abril del 2016, ante la Conferencia internacional del CEMR y fue muy valorado, frente a las posiciones del representante de ESPON, (Observatorio en Red de Asesoramiento Europeo sobre Tendencias Territoriales, que tradicionalmente ha dado y seguía dando un gran protagonismo a la ciudad, como motor de desarrollo y sobre todo a la gran ciudad). Fue un gran impulso para seguir trabajando.
A partir de ahí se constituyó un equipo integrado por: el actual alcalde de Soria, Carlos Martínez Mínguez; Serafín Pazos-Vidal, responsable de política europea de la Convención de Autoridades Locales Escocesas(COSLA) en Bruselas y secretario del Comité de las Regiones y del Congreso de Autoridades Locales y Regionales; Juana López Pagán, actual Directora General de Políticas contra la Despoblación y entonces Jefa del Área Internacional y Proyectos Europeos de la Federación Española de Municipios y Provincias y Secretaria de la Delegación Española del Consejo de Poderes Locales y Regionales, del Consejo de Europa y Mercedes Molina Ibáñez, bueno yo.
Nuestro objetivo inmediato fue incidir en el Documento que estaba elaborando una comisión delegada del Parlamento Europeo, sobre Reto Demográfico y presidida por la eurodiputada socialista Doña Iratxe García. Colaboramos de forma efectiva en la redacción de enmiendas defendidas por la Sra. García, y consensuadas con el eurodiputado conservador Señor Valcárcel, a los que expreso una vez más mi gratitud y reconocimiento. Se fundamentaron en que la Despoblación no era solo una problema demográfico, sino una verdadera crisis de territorio , qué afectaba esencialmente a territorios rurales y pequeñas ciudades del conjunto de la UE.; qué buena parte de los territorios despoblados obedecían a una emigración secular determinada por una brecha de competitividad Rural-Urbana y urbana- metropolitana; qué la actual PAC ,exigía una reforma, ya que no había cumplido con uno de sus objetivos, fijar población y que era el momento de apostar por un desarrollo rural diversificado; qué para considerar adecuadamente el envejecimiento demográfico, debía diferenciarse entre territorios rurales y urbanos , y que era necesario empezar a nuevas unidades territoriales de medida junto a variables o indicadores distintos, señalando cambios en Eurostat.
Dicho documento fue aprobado por el Parlamento Europeo en noviembre de 2017 y constituyó nuestra base para impulsar la modificación de los dos artículos del FEDER, aprobados por el Parlamento Europeo en Febrero de 2018 y por la Comisión y el Consejo en Diciembre de 2020. En esa hoja de ruta nuestra propuesta, en todo momento contó con el apoyo de los dos eurodiputados reseñados y en diciembre próximo pasado, fue apoyada por la eurodiputada de Ciudadanos, Sra. Solís. Un ejemplo de los tres, de compromiso y responsabilidad pública, desgraciadamente no percibido en la grave situación que vivimos derivada de la pandemia.
Una hoja de ruta muy larga pero espero que haya merecido la pena.
P: En qué tejado queda ahora el balón ¿De qué depende que estos fondos tengan su plasmación sobre el terreno en proyectos concretos?
R: Como bien conocemos, la política europea es subsidiaria de la de los países miembros. Ahora corresponde al Estado en asociación con las CCAA , diseñar el proceso para aplicar esos fondos. Desearía que se lograse un consenso sociopolítico lo más amplio posible, que fuéramos conscientes de la configuración de las grandes desigualdades socioterritoriales; que en algún momento, de verdad, la voz de los territorios marginados tiene que ser escuchada, por lo tanto la local; que como señala la ONU, la UE y tantos organismos internacionales, no se deje a nadie atrás y que por una vez se piense en modificar el modelo territorial de concentración , haciéndolo más policéntrico , con un mayor protagonismo de lo rural y ciudades intermedias, es decir una verdadera integración rural-urbana; que pensemos no solo en un crecimiento económico, sino en un verdadero desarrollo y que consideremos la pandemia no sólo como una OPORTUNIDAD de cambio y sí , por sus efectos, como una NECESIDAD de cambio. Los territorios despoblados tienen muchos problemas que deben ser corregidos, pero también muchas potencialidades. Quiero recordar y agradecer la fortaleza rural en el abastecimiento de alimentos durante la pandemia, con frecuencia olvidada.
No obstante, no debemos sólo dirigir responsabilidades a la UE, hay que impulsar proyectos, definir modelos territoriales de desarrollo futuro y estrategias a corto, medio y a largo plazo presupuestadas. En todo ello, el Estado, CCAA y las instituciones locales y provinciales tanto públicas como privadas, tienen un reto por delante. Me preocupa el grado de crispación dominante en la política actual y no comprendo cómo ante tantos problemas, sociales, económicos y territoriales, ante la necesidad de retomar con fuerza los principios del Estado del Bienestar, no dominen posiciones Institucionales. Si no logramos un verdadero consenso sociopolítico, incluso la aplicación de los Fondos de Compensación por la Pandemia, no conseguirá la eficacia necesaria.
P: ¿El cambio en estos reglamentos abre las puertas para otras reclamaciones históricas de Soria como las ayudas a los sobrecostes de las empresas?
R: Por supuesto, pero hay que plantear muy bien que reglamentos es posible cambiar y diseñar la estrategia adecuada para ello. No olvide que dos artículos del reglamento del FEDER nos han supuesto 4 años de trabajo en equipo y también recuerdo los trabajos y esfuerzos de todos los Estados miembros, incluida España, para definir el Plan de Recuperación para Europa por los efectos de la pandemia. No es cuestión de crear falsas expectativas o crear titulares de prensa, no es cuestión, por ejemplo, decir que ciertos territorios despoblados, tengan un tratamiento semejante a los definidos por su escasa población al norte del paralelo 60, ya que consta de forma expresa en los tratados de adhesión de Suecia o Finlandia; nuestro tratado de adhesión determinaba otros objetivos territoriales y por ello España ha sido hasta el momento actual receptora de fondos. No es cuestión de establecer similitudes con los territorios ultraperiféricos, cuyo estatus especial, viene definido en los tratados de Maastricht, (1992); Ámsterdam, (1997); y Lisboa (2007). No olvidemos que su consideración y aplicación territorial, se otorga al Consejo Europeo, integrado por todos los Jefes de Estado o de Gobierno, el presidente de la Comisión y el alto representante para Asuntos Exteriores y política de Seguridad. En el caso español cómo región ultra periférica se considera Canarias y los territorios de Ceuta y Melilla como Autónomas Especiales. Desconozco, no obstante, si esas consideraciones van unidas a modificaciones justificativas, con una hoja de ruta diseñada, para lograr los cambios necesarios en el contexto de la Unión. A España han llegado numerosos fondos de cohesión, que no se han aplicado con la responsabilidad socioterritorial requerida.
Si proponemos aplicar una gran y amplia reducción de la fiscalidad por el Estado español, me pregunto: ¿si estos territorios despoblados y desfavorecidos requieren importantes inversiones públicas, de donde salen? Creo en el Estado del Bienestar, bien concebido desde el punto de vista del equilibrio territorial y la cohesión social. Creo en la inversión pública en infraestructuras económicas, en aquellas sociales (sanidad, educación e investigación ) y culturales y por ello debemos pagar nuestros impuestos. Otra cosa es que exijamos aquello que no hemos recibido y que nos corresponde y además nos ampara nuestra Constitución. Qué el Estado español, asuma los principios constitucionales recogidos en el Titulo VIII, artículo 158.2, por el que se crea el Fondo de Compensación Territorial, para distribuir en CCAA o en su caso en provincias, que ha disminuido sus efectivos drásticamente en los últimos años. Qué considere el título VII, artículo 130, que hace referencia a la modernización de todos los sectores económicos y en particular de la agricultura, ganadería, pesca y artesanía. LA INVERSIÓN PÚBLICA ES IMPRESCINDIBLE.
Otra cosa es que se estudien exenciones fiscales muy bien definidas y se planteen a la Comisión Nacional de la Competencia para inversiones concretas, por ejemplo de emprendedores, cuyos retornos no sean solo de empleo, sino también asociados a la sostenibilidad ambientad y al desarrollo territorial entre otros. Incentivar la empresa familiar con esos objetivos fija población y en ello creo fervientemente y lo apoyo. Aunque también diría que nos debería preocupar de inmediato, eliminar obstáculos normativos que dificultan la inversión en nuevas actividades agrarias. En Soria se han dado casos, en jóvenes emprendedores, incluso recientes.
P: Han pasado 2 años de la marcha de la España Vaciada en Madrid, un año con un ministerio para el reto demográfico ¿Se está logrando algo o son todo portadas y trending topics?
R: Nunca he sido pesimista y no lo voy a ser ahora. Me niego. Si lo hubiera sido no llevaría 25 años trabajando en territorios rurales despoblados y desfavorecidos, y especialmente en la provincia de Soria; si lo hubiera sido, no hubiera presentado, ni dirigido, tres proyectos, uno por convocatoria europea, para obtener recursos y demostrar la importancia socioeconómica y ambiental, de implantar un modelo de gestión sostenible de recursos micológicos, entre otras muchas cosas, con grandes obstáculos y algunas repercusiones personales , que no vienen al caso. Y soy optimista con razones.
Quiero aludir a la primera gran manifestación organizada por Teruel existe y Soria Ya, en 2003, a la marcha lenta de Soria a Madrid, en 2004; fue un primer cambio social con reivindicaciones de muchas personas, entre las que me encontraba y se consiguió poco, pero seguimos, en unos casos desde la unión social y en otros casos desde la autoridad que otorga el conocimiento. Y en 2019 la manifestación fue mucho más multitudinaria, y diversa. El clima social ha cambiado, hay conciencia de las desigualdades territoriales y de la falta de equidad social y la DESPOBLACIÓN es su paradigma. Este momento hay que aprovecharlo y creo que ha calado políticamente, al menos de un Comisariado hemos avanzado a un Ministerio. Ojalá de verdad sea algo más que un cambio de nombre. Confío en ello y la voz de estos territorios no debe apagarse, y el conocimiento debe seguir comprometido. Ahora es el momento, como dije en un artículo reciente, de pasar de las musas al teatro, de los reconocimientos y promesas a las realidades.
P: ¿Cómo ha afectado la crisis del coronavirus al enfoque territorial en España?
R: A mi juicio se han visibilizado muchas cosas que no queríamos ver. Si consideramos que la España despoblada es una consecuencia del modo de producción de crecimiento intensivo dominante, y de su modelo territorial de concentración urbana y metropolitana, la pandemia ha mostrado buena parte de sus consecuencias negativas y no solo el éxito que se le adjudicaba.
Por citar algunas más generalizadas, la gran dependencia de abastecimiento exterior en algunos productos, con abusos por parte de quienes controlan el comercio internacional, que determinó en su momento, la destrucción de sistemas productivos territoriales de proximidad. La configuración de concentraciones humanas y productivas en espacio metropolitano, con las dificultades de control y atención que ello conlleva y con repercusiones incluso estatales, cuando se paralizan. Significaría también como gran problema la gran contaminación con consecuencias directas en la vida del planeta pero también en los seres humanos. Estudios recientes han demostrado una correlación estrecha entre contaminación, contagio y mayores riesgos por enfermedades respiratorias asociadas, es el caso de los de Leonardo Setti de la Universidad de Bolonia o Sara de Matteis de la de Cagliari. No olvide donde se han dado los mayores problemas, Valle del Po, Milán, Madrid, Barcelona , París y el Gran Este, lugares que concentran los mayores valores de producción , de población y contaminación. La pandemia está significando la calidad de vida de ciudades intermedias y territorios rurales, pero también ha visibilizado en mayor medida la grave carencia de servicios, destacando esencialmente los sanitarios. Todo no puede estar en todos los sitios, pero TODOS tenemos derecho a todo lo que proceda de inversión pública y hemos visto como las desigualdades sociales se han reflejado en la gran ciudad, pero también en las intermedias y en los territorios rurales.
Otros problemas de gran interés que estamos sufriendo, derivan de las repercusiones de la crisis económicas del 2008, en el retroceso de nuestra investigación básica y aplicada, y en aquellos servicios ligados al Estado del bienestar, caso de la sanidad y educación. También se podrían considerar comportamientos sociales poco solidarios y poco habituados a la coordinación y al trabajo conjunto, ignorando que hasta los más fuertes, se puedan ver afectados; el COVID 19 no ha distinguido fronteras.
Si analizando en profundidad esta situación, sin asumir la necesidad de ir progresivamente hacia un desarrollo sostenible y con otra dimensión de vida, equilibrado territorialmente, con mayor equidad social, en el que adquieran un protagonismo las ciudades intermedias y los territorios rurales, estaríamos muy equivocados. La solución a la crisis de los territorios despoblados, puede venir por la crisis de los territorios que siempre se han considerado el eje del planeta y del sistema productivo.
P: ¿Cómo se debe zonificar la despoblación? Hoy en día parece que todo el mundo está despoblado…
R: La despoblación medida con el criterio de densidad definido por la UE es la que es, y creo haber contestado en parte en la pregunta número 3. Creo que antes de determinar zonas de interés preferente, deberíamos abordar los graves problemas de servicios y de atención sanitaria especialmente, que sufren estos territorios y que afectan a sus residentes, no están vacíos. Creo que es de justicia resolverlos a muy corto plazo. A ello puede ayudar mucho, el proceso de mejora y creación de infraestructuras asociadas a las comunicaciones en red, sin olvidar las infraestructuras de transporte. Su definición territorial, debe ir siempre asociada a la creación de servicios y a las necesidades de un cambio productivo. Es decir, a determinar una competitividad territorial acorde con nuevos desarrollos socioeconómicos.
Corregido este grave problema, bien visibilizado por la pandemia, debemos actuar con acciones a corto y medio plazo bien definidas y presupuestadas, y en este proceso creo que deberíamos actuar con una cierta selección territorial, a efectos de determinar un desarrollo socioeconómico progresivo, conjugando problemas y potencialidades, que son muchas. Una forma de discriminación sería detectar proyectos de emprendedores ya en marcha , que están siendo ejemplo de buen hacer y de que otro mundo rural es posible. Ver su localización, analizar los problemas con los que se encuentran tanto unidos a la accesibilidad o conectividad, sin olvidar la red eléctrica, con frecuencia olvidada; ver cómo están funcionando acciones agrarias innovadoras, caso de la recuperación de razas autóctonas de explotación extensiva y sostenible; las agriculturas ecológicas con retornos de sostenibilidad importantes, las industrias agroalimentarias de calidad o a un turismo cultural bien gestionado. Podrían ser el punto de arranque para impulsar Sistemas Locales de Proximidad, y verdaderas cadenas de valor territoriales. Ese punto de arranque debería ser el impulso de una Ordenación del Territorio, cuya competencia la detentan las CC AA y algunas ni siquiera la han aprobado, que integre una comarcalización funcional, clave para un desarrollo rural integrado y efectivo.
No obstante quiero subrayar que si el Reino de España de verdad adopta de cara a futuro, un modo de producción de desarrollo apoyado en la transición ecológica y en la innovación necesariamente tiene que pensar en la configuración de un modelo territorial descentralizado y más jerarquizado, en relación estrecha rural- urbana. Determinar localizaciones de nuevos servicios, apostar por una política de vivienda adecuada, impulsar esos Sistemas Productivos Locales señalados, resulta trascendental. Mi visión de la crisis territorial de la despoblación , nos lleva a considerar acciones integradas que propicien una competitividad territorial que genere las condiciones necesarias para inversiones futuras, sin obstáculos y para fijar población. Revertir la tendencia pasada exige empleo digno y cualificado, acceso a una renta adecuada a la media dominante, pero también servicios y vivienda adecuados. La calidad de vida es compleja. El proceso será largo pero se debe empezar por acciones inmediatas, que actúen como impulsoras de otras futuras y a los residentes de hoy, se les garanticen las posibilidades de acceso a esos servicios imprescindibles y que hoy no tienen.