La inversión de la Consejería de Cultura será de 47.590 euros de los 78.087 del presupuesto final de la restauración. Se desarrollarán trabajos de acondicionamiento en los laterales del puente, así como la instalación de una pasarela peatonal de madera para poder acceder al mismo.
La Consejería de Cultura y Turismo, en colaboración con el Ayuntamiento de Covaleda, restaurará el puente de Santo Domingo, situado en el municipio soriano de Covaleda y declarado Bien de Interés Cultural en 1999. La intervención está inmersa dentro del programa ‘Uno por Uno Cultural’ de la Junta de Castilla y León, el cual pretende aunar esfuerzos en defensa del patrimonio cultural.
El presupuesto final para acometer la reforma es de 78.087,30 euros, de los cuales la Junta aporta 47.590,30, lo que supone un 60 % del total de la inversión. Las obras, que serán coordinadas por el Servicio Territorial de Cultura, han sido adjudicadas a la empresa Trycsa, y tendrán una duración aproximada de cuatro meses desde su inicio. El objetivo es establecer los medios adecuados para salvar el monumento.
El puente de Santo Domingo es de cronología incierta pero de traza medieval, y fue construido, probablemente, en el siglo XII. Actualmente está aislado de su entorno por la pérdida de los accesos desde la calzada. Cuenta con una gran bóveda de cañón con una luz de siete metros y estribo en rampa, alcanzando una longitud total de 18,50 metros, con una anchura de tablero de 2,90 metros y 4 de altura máxima de rasante.
La operación pretende acondicionar los laterales del puente, ya que debido a las crecidas del río se pueden volver a ocasionar daños similares a los actuales, provocando su deterioro.
Además de tratarse los dos puntos de acceso al puente, se instalará una pasarela peatonal de madera en ambas orillas para poder acceder al mismo y que comunique sus dos extremos, puesto que en la actualidad no se puede acceder a él, solo es posible observarlo y apreciarlo desde las márgenes del río, lo que impide su uso como puente.
También se realizará la limpieza de matorrales y vegetación de los extremos inicial y final de la intervención a ambos lados del puente, que el río utiliza de sobraderos en caso de crecida, y a la consolidación de los muros de piedra y zapatas aguas arriba degradadas por la incidencia directa del agua, mediante la restauración de estribos y limpieza de rejuntados de fábrica y recalce del tajamar.
Se procederá, además, a la instalación de apoyos independientes de madera maciza de pino con puntos regularizados con morteros y elementos de acero inoxidable y neopreno, a los restos existentes para asiento de una pasarela de madera laminada tratada, que comunique la entrada y la salida del puente y que permita su uso peatonal.
Por último, se llevará a cabo la consolidación de los restos murarios aguas abajo y la investigación de la existencia o no de otro ojo que pudiera permitir el paso de acceso más cómodo a la altura del tablero superior de la bóveda principal y el uso y disfrute del puente con la realización de la pasarela de madera.