La compañía pone en escena esta obra de Manu Gil en el teatro Juan Yagüe a las siete y media de la tarde.
Este sábado, a las siete y media de la tarde, el Ayuntamiento de San Leonardo de Yagüe ha previsto la puesta en escena de la obra 'Ancha es Castilla', de la mano de la compañía Teatropico y del autor Manu Gil.
La representación, que será oficiada en el teatro Juan Yagüe, es uno de los espectáculos que mantiene en oferta la Junta de Castilla y León, dentro de sus Circuitos escénicos.
Planteada como una revisión histórica en clave de humor de algunos de los acontecimientos y personajes más representativos de la historia del Reino de Castilla y León entre los siglos IX y XVI, y teniendo como referente acontecimientos de la actualidad política y social del momento, 'Ancha es Castilla' puede definirse como un recorrido extravagante y lleno de humor tanto por el presente presente como por la historia de la Comunidad.
Cercana a formas narrativas más propias de la televisión y el microteatro, la obra extrapola de una manera radical y muy divertida situaciones del presente y de la actualidad política, social y cultural. Para hacerlo, los personajes y acontecimientos históricos que se muestran en esta divertida tragicomedia son expuestos y planteados a través de una óptica lejana a los clichés que les han caracterizado hasta ahora, conformando un espectáculo teatral al que podríamos calificar como: La más loca historia jamás contada de Castilla y León.
Sinopsis
La reina Juana I de Castilla, la que será conocida como Juana la Loca, acompañada de su bufón Horacio y de Casilda, la única criada y sirvienta que le han permitido tener, se encuentra encerrada en el Castillo de Tordesillas. Aburrida de tan triste y dramática situación la reina pedirá a su bufón que le entretenga recordándole los momentos más significativos que han conformado la historia de su reino. Horacio, sirviéndose de su gran descaro y afilada mirada cargada de humor e ironía, accederá a hacerlo eligiendo para ello momentos y personajes tan significativos del pasado como Fernán González, el Cid, los Reyes Católicos o instituciones tan poderosas como el Santo Oficio.
De esta forma, ante la perturbada imaginación de la reina, cobrarán vida una serie de divertidas escenas llenas de humor y desatino hasta el momento en que Padilla, Bravo y Maldonado (Los Comuneros) se presenten en su castillo con el fin de pedir a Juana que encabece su revuelta y ofrecerle de nuevo la corona de Castilla.