El sábado a las 22:00 comenzará el último toque de queda, que durará solo 2 horas. Los jóvenes ya sueñan con su primera fiesta de carácter legal y los hosteleros de Castilla y León están pendientes de lo que decida el Consejo de Gobierno mañana jueves.
“A las 12 salimos de fiesta”, dicen los jóvenes, “cerramos a las 10 y volvemos a abrir a las 12”, fantasea más de un hostelero. Lo cierto es que Castilla y León vivirá la noche de este sábado al domingo las que seguramente sean las 2 horas más surrealistas de su historia. Desde las 22:00 a las 23:59 estará prohibido estar por la calle en virtud del actual toque de queda y, a partir de esa hora volverá a haber libertad de movimiento.
Siendo así y coincidiendo con un sábado no es de extrañar que muchos jóvenes fantaseen con su primera noche de juega en medio año. O al menos, la primera legal. Hoy mismo la Junta de Castilla y León ha confirmado que tanto el toque de queda como el cierre perimetral serán historia el próximo 9 de mayo. Era algo que tenía que ser sí o sí por el fin del Estado de Alarma, pero la importancia de la noticia viene más por el hecho de que da a entender que la Junta no se enrocará en tratar de mantener estas medidas por su cuenta.
Más difícil lo van a tener los hosteleros. Pues la Junta si tiene potestad para limitar el horario de apertura de los establecimientos. Por ejemplo, durante el pasado verano estuvieron varias semanas abiertos, pero teniendo que cerrar a la 1 de la madrugada. Lo que pase con los horarios y los aforos se decidirá mañana en el Consejo de Gobierno de la Junta aunque tanto Verónica Casado como Francisco Igea ya han anunciado que tienen intención de mantener medidas como el cierre del interior de los bares en los municipios con mayor incidencia.
Los hosteleros confían en que el resultado de las elecciones celebradas ayer en Madrid suponga una demostración ante los ojos de la Junta de Castilla y León de que la sociedad está dispuesta a asumir mayor riesgo a cambio de mantener mayor libertad y no dañar el empleo. También señalan la incongruencia que supondría cerrar establecimientos a una hora temprana mientras la gente tiene total libertad para juntarse en las casas sin ningún tipo de restricción y con menores medidas.
Como ya se ha señalado las restricciones que se marquen desde la Junta sin el paraguas del Estado de Alarma tendrán que lograr el visto bueno del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León. Aunque la Justicia a avalado la mayoría de las medidas de la Junta, para este nuevo periódico se abre un escenario distinto. El Gobierno anunció ayer que cuando los TSJ denieguen las medidas a las comunidades autónomas estas podrán recurrir al Tribunal Supremo. El máximo tribunal tendrá que resolver en 5 días y unificará criterios impidiendo así que lo que en unas regiones se permita en otras este vetado, tal y como ha ocurrido ya en varias ocasiones.
Mañana conoceremos esas medidas, pero desde hoy ya sabemos que, en la madrugada del sábado al domingo, cuando sean las 00:01 del día 9, el fin del Estado de Alarma traerá la libertad para salir y entrar de la comunidad y la libertad para salir de casa a la hora que se quiera y sin razón necesaria. Eso sí, antes, desde las 22:01 a las 23:59 el toque de queda seguirá vigente, los bares cerrados y no se podrá estar por la calle. Dos horas surrealistas muy en consonancia con la realidad distópica que vivimos.