Igea señala el orden de prioridades de la Junta: salvar vidas, evitar el colapso sanitario y recuperar la actividad económica. Castilla y León se plantea cambiar los umbrales para tomar decisiones, cambiar el peso de los indicadores y es “razonablemente optimista”.
La incidencia acumulada ya no refleja con exactitud lo que sucede en las UCIs. Con esa premisa la Junta de Castilla y León valora cambiar los indicadores y los umbrales de los mismos en los que se basa para tomar decisiones sobre cambios de fases y de flexibilización de restricciones. Así lo ha anunciado hoy el portavoz Francisco Igea quien ha señalado que se ha evitado una cuarta ola de muertes gracias a la vacuna.
Por ello, el próximo jueves en el Consejo de Gobierno se analizara “un acuerdo que contemple una variación en los criterios”. Esto significa que la famosa incidencia acumulada a 14 días podría dejar paso a indicadores como la ocupación hospitalaria entre los primordiales a la hora de tomar medidas. En este sentido, Igea ha recordado las prioridades de la Junta que son, por este orden; salvar vidas, evitar el colapso sanitario y recuperar la actividad económica de la manera más estable posible.
Pese a que la incidencia está controlada en Castilla y León, 151 en tendencia ligeramente descendente, la consejera de Sanidad ve preocupada las imágenes de este fin de semana y por ello la Junta ha decidido esperar a ver los efectos del fin del estado de alarma antes de tomar nuevas decisiones.
Aunque durante estas semanas se haya comprobado que el incremento de la incidencia no vaya acompañado de iguales aumentos en la ocupación de los hospitales, la situación en los mismos continúa siendo complicada. Castilla y León continúan con un 25% de ocupación en UCI con pacientes, muchos de ellos, aun de la tercera ola.
El portavoz indica que la letalidad en esta ola es “muy baja” y está bajo control por lo que será la ocupación de críticos la que empiece a tener mayor peso en la toma de medidas. Además, indica, algunas restricciones “no tienen sentido sin toque de queda” porque desplazan actividades de la hostelería a los domicilios. Igea y Casado han descartado novedades en las próximas semanas sobre el ocio nocturno y la mascarilla y las novedades podrían centrarse en dejar abrir a los bares hasta más tarde o permitirles mayor aforo.
Igea considera “una leyenda” que las restricciones de Castilla y León hayan sido de las más duras entre las comunidades autónomas. “Hay un relato montado que es difícil desmontar”, señala y explica que la hostelería ha tenido muchas más restricciones en otras comunidades.
El portavoz de la Junta de Castilla y León ha confirmado que el próximo lunes si habrá municipios que salgan de la lista de localidades con el interior de los bares cerrados. Serán aquellos que tengan menos de 150 casos por cada 100.000 habitantes. El próximo jueves el Consejo de Gobierno reordenara los criterios y establecerá nuevos varemos para tomar decisiones que podrían comenzar a aplicarse el lunes 24 de junio o, en algunos aspectos, el viernes 21 de mayo.