Carlos Zurita: “La cultura ha sufrido mucho con la pandemia”.
Lo último que hizo Rafael Benjumea Cabeza de Vaca, recientemente fallecido, como presidente de la Fundación Duques de Soria (FDS) fue autorizar la exposición de pintura ‘Cuando el Fondo se vuelve figura’, de Alicia Marsans.
Esta mañana se ha inaugurado esta exposición pictórica en el Teatro Palacio de la Audiencia de Soria. Una colección que define el conjunto de sus obras como piezas figurativas y abstractas, de cielos con nubes y paisajes. La autora, presente en la apertura, ha mostrado su agradecimiento por la invitación hecha para exhibir su legado y también ha expuesto su confianza en que sea del agrado del público soriano.
La comisaria de la exposición, Claudia Rodríguez-Ponga, ha ensalzado la figura de Benjumea diciendo que “admiraba mucho la pintura de Marsans”, ya que la inspiración de la autora expresaba “muchas conexiones que están en el fondo emotivo de esta exposición”. Aquí ha desgranado que la artista recuerda en sus lienzos las percepciones que siente tras el fallecimiento de su padre.
Carlos Zurita, duque de Soria, ha rememorado el papel de Benjumea en la trayectoria de la fundación y ha lamentado su pérdida que ha calificado como “enorme desgracia”. Sin embargo, sí ha tenido palabras de afecto hacia Rafael Benjumea Benjumea, hijo del finado, y que ahora ejerce la labor que llevó a cabo su padre.
Para Zurita, “la cultura ha sufrido mucho durante la pandemia. En múltiples áreas como la relación interpersonal”. En este punto, ha abogado por “ser optimista y mirar hacia adelante. Hay que pensar que las cosas están mejorando extraordinariamente gracias a la vacunación”. Y ha confesado que “siempre tendremos el dolor de los que se nos han ido, que han sido muchos”, por lo que “habría que recordarlos con todo el cariño y respeto que se merecen”.
Sobre el futuro de la entidad que encabeza junto con su esposa Doña Margarita de Borbón, ha indicado que “intentaremos que siga adelante: Tanto el presidente como vicepresidente son enormemente jóvenes, tienen casi la edad del alcalde. Mi hija también se ha incorporado al patronato y es joven”.
Al respecto ha significado que “no hacemos más que intentar ayudar a ese trasfondo cultural que Soria siempre ha tenido”. Algo que ha avalado por el alto nivel de conocimientos que atesora la capital. “Lo único que hemos hecho es insistir en este punto que ya es una constante en la vida de Soria”, ha concluido.