La sentencia del TSJCyL confirma la legalidad a una autorización ambiental a empresa para la nueva línea de pintado de piezas plásticas para los automóviles.
Por Orden de octubre de 2018 de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente se concedió una nueva autorización ambiental a la fábrica de automóviles de Valladolid de Renault incorporando, respecto a la anterior de febrero de 2014, la modificación sustancial consistente en acometer una nueva línea de pintado de parachoques de los vehículos.
La entidad Ecologistas en Acción recurrió ante la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León en Valladolid tal autorización, pidiendo la anulación de la ampliación de actividad, alegando que con ello se veían incrementadas, más allá de lo permitido por la normativa, las emisiones de compuestos orgánicos volátiles.
Señala ahora la sentencia que no se produce una vulneración de la Ley de 2007 de calidad del aire y protección de la atmósfera, ya que dichas previsiones no son aplicables a unas instalaciones que están sometidas a la autorización ambiental integrada, y que, en todo caso, no ha demostrado Ecologistas en Acción que haya dado lugar a que se sobrepasen los objetivos de la calidad del aire, concluyendo que no existe una relación directa entre la emisión de componentes orgánicos volátiles -COV- de la actividad fabril de Renault y los niveles de ozono determinados por la estación medidora Renault 1.
Como indicaban los Servicios Jurídicos autonómicos, reconoce la resolución judicial que no existe una relación directa entre la ausencia del plan para la mejora de la calidad del aire de la Comunidad y la emisión de la autorización ambiental de la factoría, al no ser un requisito ineludible.
Y, por último, sobre la aplicación de las mejores técnicas disponibles -MTD- en el proyecto de pintado de vehículos implantado, que eran discutidas por Ecologistas, la sentencia reconoce la aplicación de estas técnicas en su versión más moderna de 2019, con estanqueidad y diseño de las cabinas de pintura, estando robotizadas y aisladas del exterior, recirculación del aire en las mismas, o aplicación de un oxidador térmico regenerativo con una eficacia de destrucción de los COV del 95%.
Destaca la resolución judicial, ante la intención de Ecologistas en Acción de que se obligara a la empresa a utilizar pinturas de base acuosa, que la Junta no puede prescribir la utilización de una técnica o tecnología específica, sino que sólo puede exigir que los valores límite de emisiones estén dentro de los legales permitidos y, en este caso, tales valores se ajustan a los límites legales, rechazando con ello también el informe en tal sentido del Ayuntamiento de Valladolid sobre el cumplimiento de la Ley del Ruido de Castilla y León en el proyecto, o la necesidad de cambiar de ubicación al estación medidora, informe que se incorporó al expediente y en el que se alineaba con las teorías ecologistas.
A juicio del director de los Servicios Jurídicos, Luis Miguel González Gago, la sentencia tiene muy en cuenta la prueba practicada durante el juicio, con apoyo en informes periciales de toda solvencia de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, y de expertos nacionales en materia medioambiental, por lo que no es bueno generar una alarma social innecesaria, ya que sobre la formación y fenomenología del ozono existen hoy importantes lagunas de conocimiento científico, y con carácter general Valladolid y Castilla y León gozan de una calidad del aire muy buena.
Segunda vez que Ecologistas en Acción demanda contra Renault Valladolid, y segunda derrota.
Señala el director de los Servicios Juridicos de la Junta, González Gago, que desconociendo la importancia económica y social que la factoría tiene en la ciudad y los municipios cercanos, y la natural incidencia que este tipo de demandas pueda tener en la voluntad de continuar con la localización específica en nuestra ciudad de una gran empresa, como es Renault, ya en el año 2014 Ecologistas en Acción demandó a la Junta de Castilla y León, específicamente contra la Orden de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente de febrero de ese año por la que entonces se concedió autorización para el aumento de la capacidad de producción de motores y de la actividad logística de Renault Valladolid, por temas medio ambientales.
La Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León en Valladolid, mediante sentencia firme de fecha 16 de marzo de 2016, desestimó dicha demanda de Ecologistas.
Hay que recordar que en la actualidad, sólo en la factoría de Renault Valladolid trabajan entre 6.000 y 6.500 trabajadores directamente, y genera un trabajo indirecto que se estima entre 7.000 y 7.500 trabajadores –de rango 1, rango 2 y servicios-, estando apoyada la empresa por la Junta de Castilla y León a través de la Consejería de Economía y Hacienda en el nuevo Plan Industrial 2017-2020, lo que permitirá una inversión de 675 millones de euros, precisamente dirigida a la adaptación de sus infraestructuras y a la investigación en I+D.