Entre otros hallazgos, se sabe ahora que el suelo actual fue elevado 25 centímetros sobre el anterior en el siglo XIX.
En relación a los resultados del seguimiento y control arqueológico de la intervención en pavimentos, paramentos y portada de la ermita de San Bartolomé, en Ucero y promovido por la parroquia de San Juan Bautista, la Comisión de Patimonio ha conocido la existencia el solado escalonado de piedra con canal de drenaje del siglo XVIII, así como la reforma general de pavimentos realizada en el siglo XIX, la cual elevó 25 centímetros el antiguo solado y ocultó parcialmente los arcosolios y el banco corrido.
En este sentido, la Junta ha informado también que en cuanto a los restos materiales, se reseñan los fragmentos de cordobán de tipología medieval con restos de pintura de tono oscuro, una moneda de vellón de Alfonso VIII, varios lotes de cerámica contemporánea y una pequeña fosa con un enterramiento de un nonato fechado en el siglo XVIII.
Todo ello ha sido depositado en el Museo Numantino.