Su escritor, Saturnino Napal, se ha inspirado en la vida rural del pasado para mostrar las relaciones entre una familia catalana y el resto del pueblo soriano.
Castilfrío de la Sierra se ha convertido en el protagonista de una novela con marcado acento soriano. Las relaciones entre una familia catalana y el resto del pueblo son el principal eje de la obra, ‘Un caserón en Castilfrío. Aventuras de una familia catalana en Soria’.
Su autor, Saturnino Napal, se ha inspirado en la historia real de una familia catalana que se trasladó al pueblo soriano. En la novela se narra cómo construyeron su caserón o las relaciones que mantenían con los vecinos.
“Es una transcripción de todo lo que me han contado. A pesar de que catalanes y sorianos son muy diferentes, al final se han querido mucho. Montse y 4 de sus hijos (familia catalana) siguen pasando todo el verano en el caserón”, afirma Saturnino.
Otro de los objetivos que tiene la novela es realizar un retrato de la ‘España Vaciada’. El autor ha querido mostrar como se vivía en el pasado en los pueblos sorianos y como estos se encontraban llenos de vida.
“Recrea un mundo desaparecido en el 2.000. Muestra como esa vida rural ha ido desvaneciéndose junto a oficios como el pastoreo o actividades como la caza”, confiesa el autor.
A pesar de que la novela lleva 2 meses en librerías, este viernes vivirá un momento muy especial. La terraza del Centro Social de Castilfrío de la Sierra acogerá la presentación de la obra en su lugar de origen.
Saturnino Napal y el escritor del prólogo, Fernando Sánchez Dragó, se darán cita con los vecinos del pueblo para mostrarles su obra y cómo era la vida en el pasado.
El autor manifiesta que es un privilegio que “un escritor de la talla de Dragó haya colaborado en la novela, después de haber participado en la reconstrucción de numerosos caserones en Castilfrío de la Sierra”.