El canterano soriano manifiesta en Soria Noticias su cariño por el Numancia y explica cómo está siendo su etapa en el Nàstic de Tarragona.
Javier Bonilla salió del Numancia hace 6 años con destino a Grecia. A pesar de tanto tiempo fuera de casa, el lateral izquierdo de Ágreda sigue teniendo al equipo soriano en su corazón.
“Para mí el Numancia lo significa todo. Me dio la oportunidad de jugar en 2º y en mi casa, es lo mejor que le puede pasar a un canterano”, afirma.
El jugador del Nàstic de Tarragona sigue muy de cerca las evoluciones de su ex equipo. Bonilla explica que estos dos años ha vivido “con mucha pena los descensos del Numancia, ya que fueron un palo muy gordo y difícil de asumir”.
En oposición a esa circunstancia, el agredeño se muestra optimista de cara a esta temporada, después del nivel que ha mostrado el equipo durante el verano.
El lateral izquierdo, además de seguir las evoluciones de ‘su Numancia’, visita muy a menudo Ágreda: “Soy muy de ir al pueblo y siempre que puedo voy porque lo necesito. Mis amigos me meten mucha caña con el fútbol, pero los aguanto”, manifiesta entre risas.
Al preguntarle por una posible vuelta a su ‘casa’, Bonilla se sincera y señala que el año pasado hubo algún intento que finalmente no fraguó: “Está claro que me gustaría volver porque como en casa en ningún sitio. Pero ahora mismo estoy en Tarragona, estoy muy bien y espero seguir muchos años aquí”.
Esta temporada, Javier Bonilla afronta su tercer año consecutivo en el Nàstic de Tarragona. Durante su periplo en tierras catalanas, el canterano rojillo ha evolucionado en su juego pasando del lateral izquierdo al puesto de mediocentro o de extremo.
En esta ocasión, y bajo las órdenes de Raúl Agné, el lateral soriano y sus compañeros tienen el objetivo de subir con el Nàstic a 2º División: “Sería brutal porque aquí la gente está siempre con el equipo y hay muy buen ambiente en el estadio. Queremos devolver al club donde merece”.
En la misma dirección, el futbolista agredeño explica que el Nou Estadi es un terreno en el que la mayoría de compañeros de la categoría y muchos de 2º desearían jugar por las condiciones que atesora.
Para conseguir el deseado ascenso, el Nàstic de Tarragona competirá en una 1º RFEF de mucho nivel con equipos de la talla del Albacete, Sabadell o Castellón. Bonilla expresa que esta nueva competición es una “especie de 2º camuflada que será muy bonita de ver”.
Este verano no ha sido nada fácil para el jugador de Ágreda. Al comienzo del mismo, Javier Bonilla se rompió el sóleo, perdiéndose gran parte de la pretemporada. Después de mucho trabajo y esfuerzo, el lateral izquierdo ha vuelto a los terrenos de juego e incluso disputó 20 minutos en el primer partido de liga.
Una vez superados sus problemas, el futbolista agredeño desea una temporada llena de éxitos para sus dos equipos: “Mi sueño sería ascender con el Nàstic, que el Numancia suba y que dentro de dos o tres años coincidamos en Segunda o en una categoría superior”.