El presidente de la Diputación de Soria considera "prioritario" que se atienda el teléfono a quien pretende comunicarse con su médico o centro de salud. Valora el compromiso de la Junta de contratar auxiliares administrativos que atiendan esta labor de concertar las agendas.
Benito Serrano, presidente de la Diputación Provincial, participó ayer en la reunión programada por la Consejería de Sanidad con las Diputaciones y delegaciones territoriales de la Junta en las nueve provincias de la región. La intención era trasladar y hacer partícipes a todos ellos de la reorganización sanitaria que debe afrontar Castilla y León.
Serrano considera que esta era "una reunión necesaria" y la califica de "constructiva". Afirma el presidente de la Diputación que es "necesaria una reestructuración" de la sanidad, aunque considera que una solución en Soria es "difícil" por la "dispersión geográfica de la provincia, los problemas de conectividad que existen y la población envejecida que puebla la mayoría de los núcleos rurales".
Benito Serrano apunta a que la reestructuración sanitaria no debe ser igual en las nueve provincias de Castilla y León porque "cada una de ellas presenta problemas muy diferentes". Señala que se deben atender "todas las necesidades de los vecinos de la provincia", teniendo en cuenta, además, que "muchos de ellos no tienen acceso a las nuevas tecnologías y, en algunos casos, ni siquiera a las llamadas por teléfono".
El objetivo prioritario debe ser, según el presidente de la Diputación, que "alguien coja el teléfono cuando una persona llame a su médico o centro de salud". Por ello, valora el compromiso de la Consejería de Sanidad de contratar auxiliares administrativos que atiendan la labor de concertar las agendas".
Concluye Serrano instando a todos los grupos políticos a "dejar trabajar a los técnicos" y les pide "extremar el cuidado a la hora de transmitir ciertas informaciones". "No se debe hacer política con esto", señala.