Aunque la mayoría de los ciudadanos no lo notarán en exceso, se eliminan todas las restricciones de aforo y de horario. Continúa siendo obligatoria la mascarilla y mantener la distancia de seguridad, también en discotecas o bares.
Castilla y León entrará esta media noche del lunes al martes en un nuevo nivel de la desescalada que la Junta ha dado en llamar ‘de riesgo controlado’. El portavoz de la Junta señalaba que este escalón sustituye al de la ‘nueva normalidad’, término que al vicepresidente Igea no le gusta por dar sensación de que todo ha pasado cuando la amenaza es real.
Pero más allá de debates lingüísticos sobre cuanto se parece la nueva normalidad a la vieja normalidad, si una normalidad al ser nueva deja de ser normal o si la nueva normalidad va a ser el riesgo controlado, lo que los ciudadanos de Castilla y León se preguntan es ¿qué cambia esta noche en la comunidad?
Aunque la mayoría de los ciudadanos notarán poco cambio, el principal es la eliminación de todas las limitaciones tanto de aforo como de horario. Esto quiere decir que hostelería, ocio nocturno, cines, tiendas o centros comerciales podrán funcionar con los aforos y horarios previos a la pandemia.
La ley mantiene las recomendaciones y la obligatoriedad de ciertas medidas de control generales. Estás son el mantenimiento de las distancias de seguridad interpersonal y la obligatoriedad de mascarilla cuando no se pueda mantener esta. Hay que recordar que la mascarilla está regulada por una ley nacional y que es el Gobierno de España quien regula su uso.
La Junta insiste en que, con la actual situación, se puede estar en una verbena (o en un discobar) de pie, consumiendo y bailando… pero siempre con mascarilla si no se respeta la distancia de seguridad.
También se mantienen los protocolos tanto en los centros escolares, como en los centros sociosanitarios, que tienen sus propios protocolos. La idea de la Junta es mantener esta situación hasta que la pandemia se dé por terminada salvo que, lógicamente, un empeoramiento de la situación obligue a dar marcha atrás.