Los de Jordi Lluelles consiguieron empatar el partido hasta en dos ocasiones, aunque finalmente Burgos impuso su calidad.
El BM Soria vivió ayer una tarde inolvidable con su debut en la División de Honor Plata. El San Andrés fue una mezcla de emociones que terminó con un sabor agridulce por la derrota, 30-33, ante uno de los firmes candidatos a subir a ASOBAL, San Pablo Burgos.
Los amarillos comenzaron el choque en desventaja, ya que los visitantes consiguieron ventajas que alcanzaron los 5 goles. Los de Jordi Lluelles no se vinieron abajo y lograron poner las tablas en el marcador en un descanso al el que se llegó con empate a 13.
Tras el parón, los burgaleses se volvieron a escapar en el luminoso, pero de nuevo la fe soriana llevó a los de Lluelles a igualar el encuentro. A pesar de todos los esfuerzos amarillos, el San Pablo Burgos tiró de experiencia en los últimos minutos del choque y se llevó los dos primeros puntos de la temporada.
A pesar de la derrota, el BM Soria demostró estar capacitado para conseguir la permanencia, en un año que será histórico a todos los niveles para el combinado soriano.