El paleontólogo Juan Luis Arsuaga fue el encargado de dar el pistoletazo de salida a las 47 Jornadas de la Matanza del Virrey con un discurso que aludía a la tradición y a las costumbres. Destacó la presencia de “El alcalde” y “El Ovejas”, personajes de la serie ‘El Pueblo’. Los premios honoríficos culminaron una jornada emotiva y de recuerdos
Tras un año de parón a causa de la pandemia, El Burgo de Osma acogió las 47 Jornadas de la Matanza del Virrey, que comenzaban de manera oficial en un día soleado. En torno a las 13:00 horas, la Plaza Mayor recibió el primer y único rito de la matanza en directo que habrá durante todo el periodo matancero con el objetivo de evitar aglomeraciones y poder recuperar la actividad económica tras el impacto sufrido por la pandemia.
En el emblemático centro de la localidad, Antonio Callejas presentó y narró a los asistentes “una tradición que no podemos perder”, en memoria al recién fallecido ‘Cachena’”, persona muy apreciada entre los burgenses. Allí explicó, en tres fases, la historia y la importancia de un evento gastronómico con gran tradición en nuestra tierra mientras que los espectadores pudieron degustar productos de la matanza como la típica morcilla, dulces típicos y porrón.
Tras el acto, los comensales se fueron acercando a los comedores del Virrey para dar comienzo a la primera comida matancera, donde pudieron degustar un menú compuesto por 22 platos elaborados con ingredientes procedentes del cerdo en una velada más reducida de lo habitual, con música folclórica en directo, alusiones a la tradición y honores.
Alrededor de las 14:15 horas, el paleontólogo Juan Luis Arsuaga oficializó las jornadas con un discurso bautizado como la fiesta “del verraco, no solo por el cerdo, sino por la existencia de aquellas culturas prerromanas y castellanas que ya esculpían grandes esculturas de este animal”, explicó. El pregonero, que tomaba el relevo de la actriz Yolanda Ramos, expuso una explicación del proceso evolutivo para recopilar el mundo ancestral y lo colectivo y aludiar a la importancia de “vivir en comunidad, compartir, disfrutar, establecer lazos y reforzarlos”.
Asimismo, Arsuaga quiso reinvindicar la importancia de el respeto y de la tradición para conservar la cultura y llegar al equilibrio. “Queremos que el planeta siga siendo ese lugar maravilloso que hemos heredado de nuestros padres y queremos trasmitir a nuestros hijos”, manifestó. Para ello, es importante “que la gente siga viniendo, que las tradiciones se mantengan, continúen y se refuercen. El problema es que queremos comer carne, pero no demasiada, no queremos que sufran los animales ni que el planeta se estropee. He venido hasta aquí para daros mi respuesta. Nada es perfecto, todo puede ser mejorado, todo debe ser sometido a la crítica y al debate de buena voluntad”, añadió.
Tras una velada que se extendió hasta las 18:00 horas, llegó el turno de los postres, y de los honores. El momento, que llegó con expectación, destacó por la emoción, el recuerdo y el reconocimiento. Para terminar la velada, se nombró a los matanceros de honor de una edición que se extenderá hasta el próximo 10 de abril.
Algunas trabajadoras sociales y asistenciales, visiblemente emocionadas, fueron las primeras en recibir los honores como reconocimiento a su labor en El Burgo de Osma para combatir la pandemia. María Ángeles Fernández, directora general de FOES, fue la siguiente en recibirlo. Aunque ausente por motivos personales, Antonio Callejas quiso destacar su papel como “reactivista de esta tierra tras tener el valor de presentarse en Bruselas para exigir por Teruel, Cuencia y Soria”.
Antes de continuar, Callejas protagonizó un discurso más distendido aludiendo al desarrollo poblacional, a la riqueza de los pueblos de Soria y a la identidad de sus gentes. “En Soria hay pocas cosas graciosas como los gentilicios burlescos que tiene esta tierra. Si yo les hablo de un arrascapopste, ¿alguien me sabría decir a qué pueblo me estoy refiriendo? Efectivamente, a San Esteban de Gormaz. Si hablo de obispillos, a los de El Burgo; si hablo de escuerzos, a los de Valdemaluque; y podríamos hablar también de los atravesaos”. En este momento, el Virrey quiso reconocer la labor del jubilado Arcadio, vinculado a la empresa durante más de treinta años, quien recogió el premio con emoción y agradecido.
Para culminar, se nombró matanceros de honor al equipo y protagonistas de la serie “El Pueblo”, por su labor de difusión y promoción de la provincia de Soria, a la que, según manifestaron, no intentarán poner en el mapa de España, "sino de Europa y del mundo". El reconocimiento fue recogido por los actores Javier Losán (El Ovejas) y Ángel Jodra (el alcalde), quienes, satisfechos, “con los intestinos a reventar” y con la ovación de todos los presentes cerraron un día al grito de: ¡Viva Soria y viva El Burgo de Osma!".