Los de Eduardo Gallego afrontan la Final Four con la moral por las nubes tras remontar la eliminatoria previa en Logroño.
En su primer año de existencia, el filial del Balonmano Soria ha logrado la machada de finalizar segundo la fase regular, pasar la eliminatoria previa ante Logroño y clasificarse para una Final Four que se disputará este fin de semana en Agoncillo. En ella, los pupilos de Eduardo Gallego se medirán al Mar Calasancio, Escolapios y Callaghan.
Viernes, 25 de marzo, a las 19:00h vs Escolapios
Sábado, 26 de marzo, 17:00h vs Callaghan
Domingo, 27 de marzo, 12:00h vs Mar Calasancio
De cara a afrontar este calendario el equipo llega en un buen momento de forma según su entrenador: “Estamos entrenando cuatro días por semana y podremos contar con los tres o cuatro jugadores de nuestro equipo que suelen subir con el primer equipo. Tenemos la moral por las nubes después de la remontada ante Logroño, aunque prefiero quedarme con el partido de ida para que no vuelvan a pasar esos errores”.
Con esa lección aprendida, el filial amarillo afronta una fase final con los otros tres mejores equipos de la clasificación. En primer lugar, se medirán a un Escolapios al que ganaron los dos partidos ligueros y al que Gallego define como un rival que “me gusta mucho porque juega a un ritmo muy alto con gente joven, pero que tiene el hándicap de que se le hacen largos los partidos”.
Posteriormente, el sábado los sorianos se enfrentarán a un Callaghan repleto de veteranía, que juega muy rocoso y que usa muy bien la defensa 6-0. Tras esos dos primeros partidos, el domingo llegará el encuentro que podría definir el campeón ante un Mar Calasancio que finalizó primero la fase regular, ganando todos los partidos.
“Creo que si todo va bien la final tendría que decidirse el domingo. En los dos partidos que hemos jugado nos hemos quedado con mal sabor de boca porque no les hemos competido, pero creo que si damos el 100% podemos ganar. Estamos muy motivados”, expresa el preparador soriano.
Para lograr ese objetivo, Eduardo Gallego incide en la necesidad de mejorar sobre todo en la defensa y en las pérdidas de balón “ya que ellos corren mucho y en dos robos se pueden poner cuatro arriba”. Junto a eso, el técnico pide a los suyos que disfruten de una experiencia que no suele ser muy habitual.
Con todo ello y a pesar de no poder ascender por jugar como invitados en La Rioja, conseguir el título “sería algo inesperado y que no contábamos con ello ya que es nuestro primer año y el objetivo está centrado en que los jugadores cojan experiencia y minutos de calidad”. No obstante, este equipo ha roto todas las barreras posibles y el domingo podría proclamarse campeón de Liga en su estreno en la competición.