La villa episcopal ha acogido un encuentro con gran expectación en una mañana soleada y destacada por la tradicional subasta para quitar el manto a la Virgen. Tras el encuentro de los pasos en la Plaza Mayor, la procesion ha descendido por la Calle Mayor hasta la Catedral, donde se ha llevado a cabo la Santa Misa . relevo para portar el santo procesional hast
En torno a las 12:30 horas dos de los puntos principales de El Burgo de Osma acogían a dos pasos procesionales que pronto se iban a reencontrar en el punto neurálgico de la villa episcopal. De la catedral saldría el paso de Cristo Resucitado, de la iglesia de San Antón, la Virgen de la Alegría. Ambos se reencontrarían en la plaza Mayor.
Ante la atenta mirada de todos los presentes, visitantes, burgenses y turistas. Algunos desde sus balcones, otros más cerca, pero todos a la espera del momento marcado en el Domingo de Resurrección burgense. A continuación, se produciría un encuentro que supondría el inicio de un acto litúrgico respetado y marcado por las tradicionales subastas. Pasadas las 12:45 horas, llegaría el momento de la retirada del manto de la Virgen tras una subasta que ascendía hasta los 350 euros. Posteriormente, se subastarían los primeros puestos para portar el paso procesional hasta la Catedral.
Tras la retirada del manto, con una Virgen que lucía con traje blanco y mediante el acompañamiento de la Banda de Música, se procedería a descender por la calle Mayor hasta la plaza de la Catedral. El relevo para portar el paso, el respeto y la admiración marcaban una jornada que venía acompañada por el sol, la gran acogida y la tradición.
Llegaban las 13:15 horas cuando se producía la entrada al gran templo religioso para celebrar la solemne Eucaristía del Domingo de Pascua de Resurección de una localidad cuya Semana Santa es considerada de Interés Turístico Regional.