En el cumpleaós ha estado acompañado de su mujer, Teodora, que está a punto de cumplir los cien años también, con quien lleva toda una vida compartiendo, ahora juntos en la residencia Fray Pedro Pastor, y de sus hijos, nietos, familiares y demás residentes.
Quintana Redonda ha celebrado el centenario del resinero Alejandro Núñez Mateo. Un cumpleaños en el que el homenajeado ha estado arropado por su mujer, Teodora, muy cercana también al siglo de existencia y con quien lleva toda una vida compartiendo, ahora juntos en la Residencia de Fray Pedro Pastor. Del mismo modo han estado presentes sus hijos, nietos, familiares y demás residentes.
Cien años que han discurrido en su gran mayoría en su localidad, donde ha ejercido durante años la tarea de resinero, trabajando duramente en los pinares del propio municipio, extrayendo la miera.
Alejandro Núñez Mateo ha sido siempre un hombre muy amable y sonriente. Su carácter afable le ha hecho ser muy querido en el pueblo, todos le conocen y aprecian, pero ahora su sordera le impide relacionarse como antes con amigos y vecinos de la localidad.
Alejandro, junto con Teodora, han sacado adelante una familia compuesta por una hija y un hijo, cuatro nietos y dos biznietos, que son la alegría del matrimonio cada vez que acuden a visitarles.
El Ayuntamiento de Quintana Redonda y la residencia Fray Pedro Pastor han colaborado en la celebración del día, junto con la Diputación provincial, cuya responsable de Servicios Sociales, Eva Muñoz, le ha hecho entrega del tradicional pergamino con la réplica de su acta de nacimiento y la placa conmemorativa. En el Consistorio, el teniente de alcalde, Pedro Fernández le ha entregado como obsequio del municipio un bastón con el nombre del homenajeado.