El fuego, que se producía en el término de Duruelo de la Sierra, se originaba a las 15:38, siendo la torreta de Cabeza Alta donde se daba la alerta.
A las 15:38 de este viernes 22 de julio se declaraba un incendio forestal en Pinares, para el que diversos medios materiales y humanos han acudido de inmediato. Aunque en principio se suponía que el fuego se hallaba en Covaleda, el alcalde de la localidad vecina de Duruelo de la Sierra, Alberto Abad, confirmaba después que el terreno incendiado se halla dentro de este último municipio, aunque "rayando" con el primero.
El aviso era dado por la vigilancia forestal en la torreta ubicada en el paraje de Cabeza Alta, según confirmaba el regidor pinariego, quien una vez recibida la alerta ponía en funcionamiento los medios antiincendios del municipio. "Hemos sido los primeros en llegar", ha expuesto a la vez que ha mostrado satisfecho por "haber cogido a tiempo" el incendio. En esos primeros instantes se ha procedido a sofocar las llamas que "ya tenían fuerza", sobre todo porque el área son "pinos jóvenes y el fuego pasa de copa a copa rápidamente".
Abad ha indicado que la labor de extinción aérea por parte del helicóptero de la Junta posteriormente era "fundamental" para sofocar las llamas, en una labor que ha refrescado la zona minorizando su combustibilidad, además de las labores de las brigadas de tierra.
El regidor ha explicado que el incendio se daba extinguido poco antes de las siete de la tarde (18:51) y unos primeros cálculos estimaban en 1.300 metros cuadrados la superficie arbolada dañada, aunque finalmente, según el parte de la Junta han sido 1.500. "Un susto, que todo se quede ahí", ha respirado finalmente.
Esta noche se mantendrá la vigilancia con personal de tierra, probablemente de la BRIF con base en Lubia.
En Covaleda, fuentes municipales han significado que el viento también se ha aliado en las tareas de extinción ya que ha girado sobre zona quemada, con que se ha evitado que el fuego continuase su camino. Con cautela, han indicado que el origen de las llamas no ha sido natural, ni tampoco por labores en el monte, ahora prohibidas, sino por descuido o quizá por intencionalidad.
En el lugar han actuado el helicóptero de Garray con su cuadrilla helitransportada, la BRIF de Lubia con dos aeronaves y sus dotaciones; tres autobmombas; un camión nodriza; dos cuadrillas de tierra y un agente medioambiental.