Con la despoblación atacando duro en inverno y los veranos llenos con los hijos del pueblo, muchos municipios de la llamada España Vaciada crean o directamente trasladan sus fiestas al mes de agosto. A las actividades tradicionales se unen en los carteles “famosos de atrás” que llaman mucho la atención.
El puente de la Asunción de la Virgen es el paradigma perfecto de lo que sucede en la España más rural en verano. Miles y miles de pueblos de toda la geografía celebran desde hace siglos sus fiestas en agosto y otros miles han creado eventos de todo tipo al calor, nunca mejor dicho, de las semanas del año en que cuentan con más población.
Torrubia de Soria podría ser un buen ejemplo de lo segundo y, sus fiestas, buen reflejo de las tendencias más actuales. Situado en el Campo de Gómara, una zona de tradición cerealista donde históricamente se ha hecho ‘mucho dinero’, está a caballo entre Soria y Zaragoza y hace un siglo multiplicaba por 10 su población actual.
Sus 40 vecinos durante el invierno se multiplican por 5 en verano, “y aquí no sube tanto como en otros pueblos”. Lo explica su alcalde Raimundo Martínez quien se hizo famoso hace 3 años por acudir con su burra a Madrid durante la manifestación de la España Vaciada.
Raimundo es uno de esos nombres anónimos que en Madrid engrosan la lista de políticos que supuestamente hay que reducir, aunque su retribución anual sea de 0€. Su trabajo como alcalde, aparte de escuchar y ayudar a los vecinos en el día a día, consiste en tratar de cazar algún plan, obra o carretera por parte de la Diputación y en poner algo de foco sobre los problemas del pueblo. En 2020 el dinero de las fiestas se dedicó a luchar contra el Covid con la donación de cientos de mascarillas al Hospital de Soria en los momentos más duros de la pandemia.
Su objetivo, quién sabe si imposible, es que el pueblo tenga una mejor conexión después de quedar ‘aislado’ en 1985 cuando su estación de tren quedó abandonada tras el desmantelamiento de la línea férrea entre Santander y el Mediterráneo. Junto a ello una misión, está más realista, que, aunque muchos ‘cosmopaletos’ de ciudad les parezca superflua e incluso grosera, es vital para sus vecinos; organizar las fiestas.
Así, a partir de este miércoles 17 los vecinos de Torrubia y los de los pueblos de la comarca, que por algo se evita directamente el puente, tienen ante sí un programa que continente todo lo que el lector esperaría. Un par de misas, hinchables para los más pequeños, una comida de hermandad “con cordero asado de la tierra” presume Raimundo y mucha música.
No faltarán los juegos populares, aunque aquello de los bolos para las mujeres y la tanguilla para los hombres ahora quede feo decirlo. Por la zona que es tampoco faltarán las partidas de guiñote, aunque el momento más esperado sea el bingo y sus 1.000 euros de premio. Pero pese a lo elevado del premio del juego de azar por excelencia, son otros dos detalles lo que definen muy bien las fiestas de Torrubia y, con ellas, las de buena parte de la España Vaciada.
Las fiestas se celebran en honor a la Virgen del Pilar, ya les dije que el pueblo tiende hacia la zona de Aragón, pero desde años tienen lugar en agosto. “Son en honor a la Virgen del Pilar, pero haciéndolas ahora viene más gente y están los hijos del pueblo”, explica Raimundo a Soria Noticias. Dichoso siglo XXI en que hasta los Santos y las Vírgenes están sometidos a las normas de la popularidad y la audiencia.
El otro detalle llamativo es el concierto estrella. El miércoles 17 de agosto a las 19;30 en la plaza del pueblo; King África. El rey del verano, o al menos de los veranos de los años 90, ofrecerá un concierto donde tocará todos sus grandes clásicos. La Bomba y su versión de Paquito el Chocolatero se replican estos días de pueblo en pueblo, de verbena en verbena.
King África no será el primero en pasar por las fiestas de Torrubia. Karina y Marianico el Corto también han pasado por aquí en anteriores veranos. Tampoco es algo exclusivo de Torrubia. Ayer Quintana Redonda traía a los Mojinos Escozios y otros pueblos de la provincia como Fuentelsaz se han saltado a la palestra por traer a nombres como Víctor Manuel o Los Chunguitos.
Son, como los define Raimundo, “famosos de atrás que aun atraen a su gente”. Lo cierto es que la realidad demuestra que la mayoría de estos conciertos son un éxito en cuanto a afluencia y a poner, en cierta medida, el pueblo en el mapa. Y para nada suponen un roto en las arcas municipales pues su caché es “perfecto” y muchas veces menor que el de muchas de las orquestas que recorren la geografía española.
Y así es como King África celebrará las Fiestas del Pilar en pleno agosto en un pequeño pueblo soriano de 40 habitantes. La bomba.