Rocío Lucas, consejera de Educación, asegura que "durante dos cursos las medidas han respondido a un protocolo sanitario que ahora no se exige".
Castilla y León se prepara para la vuelta al cole. El viernes 9 de septiembre volverán los alumnos de Primaria y el miércoles 14 la mayoría de los de la ESO. Artes, deportes e idiomas no empiezan hasta octubre. Pero todos ellos tendrán una cosa en común, regresarán a las aulas dejando al Covid-19 en el pasado.
Ese primer día de clase se sucederán las sonrisas y las lágrimas, emociones que se podrán distinguir a la perfección pues no habrá mascarillas que las oculten. También volverán los abrazos, pues se ha descartado también el mantener la distancia de metro y medio de separación.
Rocío Lucas, consejera de Educación de Castilla y León, ha argumentado esta decisión con razones "estrictamente sanitarias". En rueda de prensa ha asegurado que "durante dos cursos las medidas han respondido a un protocolo sanitario que ahora no se exige ni nos han trasladado las autoridades a nivel nacional".
Lo que no ha explicado la responsable de educación es si la Junta mantendrá otra de las medidas vigentes durante los últimos dos cursos, el refuerzo docente que permitió la contratación adicional de 1.350 profesores. Ya en septiembre del año pasado Lucas pedía "no mezclar" el debate de las ratios en las aulas con la situación del Covid y expresaba que "no nos podemos acostumbrar a que la pandemia esté continuamente con nosotros".