Vox anuncia que se celebrará el día de Santiago Apóstol (25 de julio) y el 2 de enero (el traslado del domingo de Año Nuevo) donde los de Abascal quieren conmemorar la Toma de Granada por los Reyes Católicos. Resulta curioso que el sacrificado sea el día de la comunidad, que caé en domingo y que no tendrá puente.
Nunca la elección de los festivos laborales había generado tanto revuelo por estos lares como este año. Todo comenzó con la intención de Vox de celebrar el patrón de España, Santiago Apóstol el 25 de julio. Una fiesta que se utiliza como comodín de ciento al viento cuando ‘sobran’ festivos pero que los de Abascal querían recuperar.
“Es una anomalía que Castilla y León no celebre el patrón de España cuando la comunidad es la cuna de España”, señalaba García Gallardo, vicepresidente de la Junta y líder de Vox en la región. Así pues, tras un par de décadas sin celebrarlo el nuevo equipo de gobierno y en concreto la consejería de Mariano Veganzones (Industria de quien depende el calendario laboral) se proponía honrar al patrón de la patria.
Pero el problema era que para hacer no laborable ese 25 de julio había que convertir en laborable alguno de los días pactados previamente con los sindicatos. La primera opción fue el 2 de enero, un lunes que se convierte en festivo al caer año nuevo en domingo. Los sindicatos y parte de la sociedad de Castilla y León se puso en pie de armas contra una medida que consideraban arbitraria y que perjudicaba gravemente a las familias.
Perder un festivo en Navidad, eliminando la posibilidad del puente de Año Nuevo para ganar un martes a finales de julio solo podría ser del agrado de los más grandes fans de Santiago Apóstol. Pero Vox buscó y rebuscó y parece haber encontrado una solución imaginativa. Similar, pero que levanta menos ampollas.
El festivo que se eliminará será el planificado para el 24 de abril, también lunes y también festivo al trasladarse una fiesta que se celebra en domingo… el día de la comunidad. Castilla y León no tendrán festivo para celebrar su autonomía, pero eso en una región con poco sentimiento identitario levanta menos polémicas.
Así Vox da por hecho en su perfil de Twitter que Castilla y León tendrá durante 2023 como jornadas no laborales tanto el 2 de enero como el 25 de julio. “Celebraremos la Toma de Granada por los Reyes Católicos como se merece…”, asegura el perfil de Twitter de Vox en las Cortes. En esa misma confirmación también señala que se celebrará el día de Santiago Apóstol por lo que, ineludiblemente, el sacrificado es el 24 de abril.
En la misma conversación, el que fuera portavoz de la Junta de Castilla y León, el líder de Ciudadanos Francisco Igea, compartía el documento remitido por la consejería para su aprobación definitiva en las próximas semanas en el Consejo de Gobierno (será entonces cuando las fiestas sean oficiales).
Según lo expuesto serán fiesta en Castilla y León:
El 2 de enero, por el traslado de Año Nuevo
El 6 de enero, Epifanía del Señor
El 6 de abril, Jueves Santo
El 7 de abril, Viernes Santo
El 1 de mayo, Fiesta del Trabajo
El 25 de julio, día de Santiago Apóstol.
A ellos habrá que sumarle las 2 fiestas locales de cada municipio y los 8 festivos nacionales no sustituibles (Como la Constitución, Navidad o la Virgen de Agosto).