El modelo de Atención en Red mejora la calidad de atención que reciben los mayores en las residencias y también la de quienes residen en su domicilio y necesitan apoyos a su vida independiente. El libro que se ha presentado hoy reúne las aportaciones, estudios y análisis de un amplio grupo de expertos y profesionales desde el conocimiento científico sobre la atención residencial.
Para la Junta de Castilla y León, ofrecer una atención residencial de calidad a las personas mayores o dependientes es una prioridad. Durante los últimos años, y muy especialmente a raíz de la pandemia, la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades está impulsando un nuevo modelo de atención centrado en la persona. Se basa en unidades de convivencia que permiten la creación de entornos íntimos y acogedores, lo más parecido a un ‘hogar’, que evitan la masificación y facilitan la cohabitación y el desarrollo del proyecto vital de cada persona. Además, permiten una atención integral personalizada según sus necesidades y preferencias para que las personas que precisen apoyos puedan seguir teniendo control sobre su vida y continuar viviendo de forma acorde a sus valores y preferencias, de manera que el centro residencial sea una continuidad de su hogar y de su vida cotidiana. Para quienes residen en su domicilio y necesitan apoyos para su vida independiente, esta metodología apuesta por las estancias diurnas y los centros multiservicios.
El objetivo es claro: que la persona dependiente pueda seguir desarrollando su propio proyecto de vida. Hay muchos mitos falsos sobre este modelo y con la finalidad de rebatirlos nace el libro ‘El modelo Atención Integral Centrada en la Persona AICP y sus beneficios en residencias de personas mayores’ que se ha presentado esta mañana en el transcurso de una jornada que ha inaugurado la consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Isabel Blanco. Se trata de una obra que reúne las aportaciones, estudios y análisis de un amplio grupo de expertos y profesionales sobre el modelo de Atención en Red y que, con rigor y profesionalidad y desde el conocimiento científico, va a permitir seguir avanzando en la mejora del modelo. “Esta jornada sirve de marco para la reflexión, el intercambio de experiencias y el análisis de las aportaciones de expertos en la atención a personas mayores rebatiendo los falsos mitos sobre este modelo. Mitos que surgen de errores que se basan, en su mayoría, en el desconocimiento del modelo y de sus fundamentos éticos, técnicos y organizativos, como son, por ejemplo, creer afirmaciones como que las sujeciones son necesarias para evitar caídas, que la presencia de la familia en los centros entorpece la vida de estos, que no tiene sentido hablar de proyecto de vida cuando la persona está cerca de la muerte ‘porque no se entera’ o que módulos de 25 o 30 personas son unidades de convivencia”, ha explicado la consejera.
Castilla y León cuenta con la mayor cobertura residencial de toda España
Actualmente, Castilla y León cuenta con 48.602 plazas para mayores en 687 centros residenciales y 5.910 plazas en 456 centros de día. El modelo que adopten estos centros se convierte en una decisión muy relevante para su vida y también para sus familiares. La atención a las personas mayores y personas dependientes es una de las principales prioridades de la Junta de Castilla y León, motivo por el que ha optado por un modelo que mejora significativamente la calidad de atención que reciben los mayores en las residencias y también la de aquellos que residen en su domicilio y que necesitan de apoyos a su vida independiente, a través de las estancias diurnas y los centros multiservicios. Isabel Blanco ha destacado que la Junta de Castilla y León ha apostado por el desarrollo de una extensa red residencial “que ha hecho posible que contemos con la mayor cobertura residencial de toda España, 7,92 %”.
En cuanto al modelo AICP, la consejera de Familia ha explicado que se trata de un modelo de éxito, demandado tanto por los propios mayores como por sus familiares, y su progresiva implantación en Castilla y León está situando a la Comunidad a la vanguardia en la calidad de la atención residencial a las personas mayores. Además, cuenta con el reconocimiento de la comunidad científica y profesional, con el apoyo incondicional del sector profesional de la atención residencial en Castilla y León y ha despertado el interés de la Unión Europea.
Esta metodología se basa en la atención centrada en la persona y en el respeto a sus proyectos de vida, en el que el centro residencial debe ser una continuidad del hogar y de la vida cotidiana de las personas. Se trata de poner en el centro de la atención a la persona y su derecho a gestionar su propia vida, respetando y apoyando sus decisiones sobre los cuidados que quiere recibir y cómo quiere recibirlos. Además, dota a los profesionales de un papel esencial en la atención, ya que se asignan de forma individualizada a todos los residentes un profesional de referencia de atención residencial y un gestor de caso para optimizar la coordinación entre los residentes, la familia, el profesional de referencia y el resto de los profesionales y estructuras del centro.
Implantación del modelo AICP en la Comunidad
La consejera de Familia ha reafirmado la apuesta decidida de la Junta por la implantación definitiva de este modelo. La futura Ley reguladora del Modelo Atención Residencial para cuidados de larga duración en Castilla y León incorpora la metodología centrada en la persona que reciben las personas mayores en las residencias de la Comunidad, tanto públicas como privadas, que supone un cuidado individualizado, incluyendo el acompañamiento emocional y convirtiendo a los centros en hogares, organizados en unidades de convivencia.
Este modelo también apuesta por la innovación a través de la incorporación de las nuevas tecnologías que, entre otras cuestiones, posibilitan ejercitar las capacidades cognitivas y corporales y evitar el estancamiento psicológico y físico.
Con este modelo, las instalaciones son operativas, amables, saludables, eficientes energéticamente y sostenibles, tanto en su proceso de construcción como en el de su posterior mantenimiento. Por ejemplo, para lograr la mayor eficiencia energética y confort, se elige la mejor orientación de las diferentes dependencias y, especialmente, de las habitaciones, con una configuración de la unidad de convivencia que permite tener vistas del exterior, ventilación y luz natural. Esto, además, permite reducir la demanda energética junto con el empleo de energías renovables y el uso de equipos de alta eficiencia. Los nuevos centros adoptarán en todas las fases implicadas criterios de ‘economía circular’ que tienen por objetivo reducir tanto el consumo de materiales y energía, así como la producción de residuos, cerrando los ciclos o flujos económicos y ecológicos de los recursos.
Los centros funcionan en unidades de convivencia, que son pequeños espacios concebidos como ‘hogares’, similares a los domésticos, pensados para favorecer que el usuario siga manteniendo su intimidad y el control de su vida y se encuentre como en su propia casa.
La nueva norma cuenta con la participación, el consenso y el diálogo de todos los agentes implicados y se basa en la evidencia, la investigación y la ciencia. A su vez, hace una apuesta por la innovación y la calidad de los servicios residenciales incorporando un mecanismo para promover y verificar la calidad de los servicios residenciales, tomando como modelo los principales sistemas de servicios sociales de los países de nuestro entorno, asumiendo funciones relativas a la autorización, el registro, la acreditación, la inspección y la estandarización y/o la evaluación de los servicios de atención a la dependencia. En esta línea, la Gerencia de Servicios Sociales impulsará la calidad y la innovación continua de la atención prestada a través de la evaluación de la calidad de los servicios residenciales, del desarrollo de estándares de calidad, la elaboración de directrices, guías y manuales de buenas prácticas, promoviendo actividades de formación especializada y la sensibilización social.
La consejera de Familia ha concluido manifestando que tanto de la obra que se ha presentado como de las aportaciones que se realicen en el desarrollo de la jornada “se podrán obtener interesantes reflexiones que redundarán en la mejora constante de la calidad de vida de las personas mayores de esta Comunidad y muy especialmente con aquellas que se encuentran en situación de dependencia”.