Se trata de un proyecto piloto, que afecta a 24 iglesias y ermitas de la provincia de Soria, y que pretende servir como base para su extensión a la Comunidad. En el pasado mes de octubre, la delegada territorial ya mantuvo una reunión de trabajo previa con responsables municipales y párrocos de núcleos de menos de 100 habitantes con templos BIC.
La Consejería de Cultura, Turismo y Deporte ha publicado en la Plataforma de Contratación del Sector Público, con un presupuesto base de 884.293,14 euros (impuestos incluidos), la licitación de los servicios de monitorización e incorporación de tecnologías digitales para la protección, conservación, vigilancia y difusión de bienes inmuebles singulares protegidos en la provincia de Soria.
Este contrato está financiado con Fondos Europeos FEDER REACT-UE. Las ofertas podrán presentarse hasta el próximo 8 de febrero y el plazo de ejecución de los trabajos es de 50 meses.
El objeto es la ejecución de un contrato de servicios de monitorización remota e incorporación de tecnologías digitales para la protección, conservación, vigilancia en determinados edificios protegidos de la provincia de Soria. Se trata de un proyecto piloto que afecta a 24 edificios y que pretende servir como base para su extensión a un ámbito territorial superior.
El proyecto contempla la instalación de sistemas de parametrización de las condiciones interiores que afecten a la conservación del patrimonio cultural, realización de cálculos justificativos, estudio y justificación de la normativa vigente de aplicación, así como la monitorización, vigilancia, protección y seguridad contra la intrusión, protección contra incendios y protección contra el rayo en el citado conjunto de edificios de la provincia de Soria.
Este proyecto se inserta en las acciones referidas al proceso de digitalización del patrimonio cultural, con la finalidad de mejorar su documentación, conservación, gestión, conocimiento y accesibilidad a la sociedad.
En función de las necesidades específicas de cada uno de los edificios, se planificarán una serie de servicios destinados a la protección, conservación, vigilancia y difusión de los datos.
En una primera fase (monitorización) se llevará a cabo la ejecución de los trabajos e infraestructuras necesarias para desarrollar el ‘Servicio de monitorización e incorporación de tecnologías digitales’ en la protección, conservación, vigilancia y difusión de los 24 bienes inmuebles singulares protegidos se la provincia de Soria. El plazo establecido es de dos meses y medio contabilizados a partir del día siguiente a la formalización del contrato y en todo caso con anterioridad al 30 de junio de 2023.
En la fase segunda (servicios vinculados) tendrá lugar el desarrollo de los ‘Servicios vinculados’, con un plazo máximo de ejecución de cuatro años.
Los bienes seleccionados son 24 iglesias y ermitas de la provincia de Soria, clasificados en dos lotes, por razones de proximidad geográfica, para facilitar las labores de ejecución, mantenimiento y control.
En el Lote 1, Zona Este, los inmuebles incluidos son: Iglesia parroquial de San Pedro, en Abanco (Berlanga de Duero); Iglesia de San Martín, en Aguilera (Bayubas de Abajo); Iglesia de San Miguel Arcángel, en Andaluz (Berlanga de Duero); Iglesia de la Asunción de Nuestra Señora, en Beltejar (Medinaceli); Iglesia de San Martín, en Berzosa (El Burgo de Osma); Iglesia parroquial de San Juan Bautista, en Brias (Berlanga de Duero); Iglesia parroquial de San Miguel Arcángel, en Caltojar (Caltojar); Iglesia de San Pedro, en Caracena (Caracena); Ermita de San Miguel de Gormaz, en Gormaz (Gormaz); Iglesia de San Juan Bautista, en Ligos (Montejo de Tiermes); Ermita de la Virgen del Val, en Pedro (Montejo de Tiermes); Iglesia de San Martín, en Rejas de San Esteban (San Esteban de Gormaz); Ermita de San Bartolomé, en Ucero (Ucero); Iglesia de Santa María Magdalena, en Valdenarros (El Burgo de Osma); e Iglesia parroquial Nuestra Señora de la Asunción, en Villasayas (Villasayas).
En el Lote 2, Zona Norte: Iglesia de San Pedro, en Cerbón (Cerbón); Iglesia del siglo XVIII, en Chavaler (Garray); Iglesia de San Bonifacio, en Espejo de Tera (Almarza); Iglesia de Nuestra Señora de los Ángeles, en Fuensaúco (Renieblas); Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, en Hinojosa del Campo (Hinojosa del Campo); Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de la Asunción, en Los Llamosos (Quintana Redonda); Iglesia románica del siglo XII, en Omeñaca (Arancón); Iglesia de San Millán, en Oncala (Oncala); e Iglesia de Nuestra Señora del Collado, en Valtajeros (Valtajeros).
En el pasado mes de octubre, la delegada territorial, Yolanda de Gregorio, mantuvo una reunión informativa con los párrocos y responsables municipales de los ayuntamientos con templos declarados Bien de Interés Cultural (BIC) en núcleos de menos de 100 habitantes de la provincia de Soria.
El objetivo de este encuentro era exponer los trabajos realizados hasta ese momento por la Junta de Castilla y León, con el objetivo de situar a Soria como provincia piloto en la que desarrollar un ‘Programa para la conservación preventiva y seguridad remota de patrimonio cultural en áreas rurales de baja densidad poblacional’. Como acción inicial, ya se había realizado un estudio analítico de cada uno de los templos que formarían parte de este proyecto, estudio que fue adjudicado a la empresa Juan Antonio Muñoz Rubio por un importe de 17.968,50 euros.
De cada uno de los templos se elaboró un análisis monográfico con las necesidades para el citado control, que de forma genérica son: alarma, circuitos cerrados de televisión, control antincendios, control de pararrayos, monitorización ambiental, monitorización de infraestructuras, necesidades fotovoltaicas, estudio de tensión eléctrica, etc.
Una vez que los responsables de la Diócesis de Osma-Soria y de cada uno de los templos han dado su visto bueno y conformidad a participar en este programa, se procede, como ya adelantó Yolanda de Gregorio, a la contratación de todos estos servicios, que serán claves para el control de los bienes y para sus futuras actuaciones. La delegada territorial calificó este programa “como una gran oportunidad para poner a salvaguarda el importante patrimonio cultural de la provincia en aquellas zonas que por su menor densidad poblacional pueden estar más expuestas a los peligros”.