Los pasteleros artesanos sorianos agotan en tres horas más de medio millar de bocados del dulce más representativo de la provincia.
La Asociación Soriana de Empresarios de Confitería, Pastelería, Bollería y Repostería (ASEC) presentaba este martes ayer la costrada de Soria en Madrid Fusión, el congreso de alta cocina más importante a nivel internacional.
En la capital de España, ante los profesionales más destacados del panorama gastronómico actual, fue dado a conocer el postre artesano más representativo de cuantos se elaboran en Soria. Una presentación que estuvo amparada por el chef Óscar García, del restaurante Baluarte, único de los dos que acreditan una estrella Michelín en la provincia.
La acción forma parte de la campaña de promoción de la costrada iniciada en 2020 por los artesanos pasteleros asociados, que coinciden en destacar las características excepcionales y singulares de un postre que ya es un producto de referencia en la gastronomía provincial.
Hasta el stand de la Diputación Provincial de Soria, en el pabellón 14 del IFEMA madrileño, fueron dispuestos 500 bocados de costrada de Soria, que se agotaron en unas tres horas.
Entre los cientos de visitantes al stand soriano, la pastelera destacó la presencia de alumnos de distintas escuelas de Hostelería que quisieron probar el dulce soriano tras haberlo conocido de forma teórica en sus clases, además de varios establecimientos de restauración de distintos puntos de la geografía española que expresaron su deseo de adquirir costradas para incluirlas en la carta de postres.
Por su parte, la vicepresidenta de la Diputación, María José Jiménez, se desplazaba a Madrid, donde destacó la voluntad de la institución provincial de dar la oportunidad a los productores sorianos de participar en Madrid Fusión para aumentar sus contactos y oportunidades de venta.
La Costrada de Soria es un postre tradicional de la provincia de Soria que originalmente se componía de varias capas de hojaldre y crema pastelera y al que posteriormente se le añade la nata.
Las primeras referencias a la tarta soriana por excelencia las recoge la prensa local en 1928 en su crónica social, cuando la costrada aparece como cierre dulce de un menú de una boda.