Ledesma: "Era necesario lanzar productos para la piel que no hicieran daño"

Dido Eco Beauty es la marca de cosmética “verde, sostenible, cero agresiva y producida con productos de la naturaleza”, que invita a un cuidado de la piel “sin prisa" y sin que la obsesión actual por el paso del tiempo sea motivo de preocupación.

La emprendedora y periodista, Shandra Ledesma, ha lanzado una línea facial de cosméticos veganos, libres de crueldad animal, dermatológicamente testados, sin parabenos y con certificado Ecocert de laboratorio, que significa que cumplen con estrictos criterios medioambientales.

Ledesma asegura que, a pesar de que el periodismo es su verdadera vocación, siempre tuvo inquietud por emprender y hacer algo por su cuenta. Esto unido a su preocupación por el cambio climático, el maltrato animal y el estudio de cosméticos ecológicos le impulsó a crear nuevos productos para el cuidado de la piel, que proporcionan bienestar y salud.

"Empecé en casa a hacer mis propias formulaciones. Todavía a día de hoy, aunque trabajo junto con un laboratorio elaboro mis propios jabones que regalo a mis amigos. Creí que era necesario lanzar productos para la piel que no hicieran daño porque las cremas que hay en el mercado tienen, en su mayoría, parabenos, pfalatos PEG, EDTA y siliconas, entre otros. Es decir, se hacen composiciones con ingredientes que no sabes ni lo que son y, por ello, quise que los productos no hicieran daño ni a la piel ni al medio ambiente”, resalta.

Ledesma afirma que le encanta el proceso de creación y al día de día de la vorágine del periodismo suma la creación de nuevos productos ‘eco’, la escritura y el aprendizaje en terapias de masaje.

Respecto a los ingredientes que utiliza en su línea de cosméticos, Ledesma detalla que todos los aceites y principios activos de los productos Dido son naturales, que son los más “afines” con la piel, por ello aportan muchos beneficios. “Ahora se analiza las propiedades del cannabidol, que tiene propiedades terapéuticas y cosméticas. Las cremas tienen una baja concentración de esta sustancia y ayudan a la regeneración de la piel”, aclara.

Para la limpieza diaria de la cara, Ledesma ha lanzado la línea con jengimbre, que da mucha luminosidad, mientras que la mascarilla tiene como ingredientes principales el pepino y el arroz. “Las cremas están diseñadas para pieles sensibles. La piel se regenera cada 28 días y evoluciona por lo que hay que aportarle vitaminas y nutrientes. Estos principios activos tienen agentes antioxidantes e hidratantes”.

A la gama de productos se le unen masejeadores faciales de piedra natural o ‘gua sha’ que tienen un efecto “óptimo” sobre el tejido muscular y cutáneo, ya que promueve la circulación y la regeneración celular. Además, también se venden muselinas y discos desmaquillantes reutilizables para generar menos residuos. "Esta gimnasia facial ayuda a mantener el tono muscular y promueve un cutis más radiante. Además, ayuda a relajar la mente”.

La emprendedora trabaja de la mano de un laboratorio, que se encarga de dar forma a sus ideas con la formulación y el proceso adecuado. Sus productos se comercializan a través de la web y, de momento, no se venden en comercios ni perfumerías y son adquiridos por mujeres y hombres.

Dido Eco Beauty tiene su inspiración en la fundadora y primera reina de la legendaria ciudad de Cartago. Una mujer que se enfrentó y resolvió con gran destreza un difícil problema matemático complejo y que, a la vez, afrontó un complejo viaje personal. Ese espíritu aventurero, curioso e inconformista es el que le guía para hacer llegar una cosmética natural, ecológica, saludable y de calidad a quienes desean sentirse bien en su piel respetando el planeta, nuestro hogar común.