Está amparada en un estudio económico encargado por el Consistorio sobre los valores catastrales del municipio.
l Ayuntamiento de Almazán ha aprobado inicialmente una nueva ordenanza de terrazas de establecimientos hosteleros como ocupación de vía pública. Un cambio que se produce después de la derogación de la anterior normativa de 2020 para poder eximir a estos negocios de las tasas de uso de suelo público.
La ordenanza refleja una tasa basada en las conclusiones del estudio económico en atención a los valores catastrales del municipio (valor del suelo y de la construcción y periodo de amortización), así como la corrección con el coeficiente de situación de las propias calles (2/1.5/1) a lo que finalmente se adicionaría un 5 % de gastos de gestión.
La base imponible de la tasa seguirá siendo la superficie ocupada medida en metros cuadrados, independientemente de los elementos que se incluyan.
Fuentes del Ayuntamiento que preside Jesús Cedazo indican que las tarifas que aprobadas este lunes en pleno, por unanimidad, “incluyen el cambio más sustancial en relación a la ordenanza derogada que es la inclusión del periodo anual, y la posibilidad de fraccionar la tarifa anual”.
Igualmente se amplía el periodo estival y se mantiene la posibilidad del pago por quincenas, ahora al mismo coste.
Por último, se incorporan una serie de aspectos para actualizar la ordenanza, como la inclusión de mobiliario como calefactores, las barreras laterales, cuestiones relacionadas con la protección del tránsito de viandantes, accesibilidad y de la propiedad privada.
“En relación a municipios de nuestro entorno es posiblemente la tasa más económica, con la finalidad de seguir apoyando al sector hostelero”, calculan en el Consistorio.
Poniendo un ejemplo con la anterior ordenanza, una terraza de 40 metros cuadrados en la Plaza Mayor, entre el 1 de mayo y el 15 de octubre hubiese pagado 730 euros, y con la ordenanza actual, esa misma superficie y ese mismo periodo tendrá una tasa de 513,60€ euros. Por otra parte esa misma terraza autorizada todo el año generará una tasa municipal de 737 euros. “En resumen se estima que con la nueva ordenanza los establecimientos tendrán un ahorro entre el 20% y el 30%, según la tipología de calle y los periodos solicitados”, calculan los responsables municipales.
Del mismo modo han indicado que la tasa está basada en el estudio económico encargado por el Ayuntamiento y “en su aplicación se intenta seguir favoreciendo y dinamizando un sector estratégico fuertemente golpeado. La tasa ha sido aprobada por unanimidad de todos los grupos políticos”.
Aplicación en otros municipios
También en han significado en el Ayuntamiento que los municipios del entorno y muchos de la Comunidad vienen recuperando la aplicación dentro de la normalidad de sus terrazas. Lugares que “contienen generalmente tarifas por encima de las planteadas en esta ordenanza y menos flexibilidad en su aplicación”.
“Las tasas son tributos obligatorios que están regulados, sin embargo los precios públicos son voluntarios y permiten a las entidades públicas obtener beneficios o subvencionar distintos tipos de actividades”, han concluido en el Consistorio.
Igualmente se amplía el periodo estival y se mantiene la posibilidad del pago por quincenas, ahora al mismo coste.
Por último, se incorporan una serie de aspectos para actualizar la ordenanza, como la inclusión de mobiliario como calefactores, las barreras laterales, cuestiones relacionadas con la protección del tránsito de viandantes, accesibilidad y de la propiedad privada.
“En relación a municipios de nuestro entorno es posiblemente la tasa más económica , con la finalidad de seguir apoyando al sector hostelero”, calculan en el Consistorio.
Poniendo un ejemplo con la anterior ordenanza, una terraza de 40 metros cuadrados en la Plaza Mayor, entre el 1 de mayo y el 15 de octubre hubiese pagado 730 euros, y con la ordenanza actual, esa misma superficie y ese mismo periodo tendrá una tasa de 513,60€ euros. Por otra parte esa misma terraza autorizada todo el año generará una tasa municipal de 737 euros. “En resumen se estima que con la nueva ordenanza los establecimientos tendrán un ahorro entre el 20% y el 30%, según la tipología de calle y los periodos solicitados”, calculan los responsables municipales.
Del mismo modo han indicado que la tasa está basada en el estudio económico encargado por el Ayuntamiento y “en su aplicación se intenta seguir favoreciendo y dinamizando un sector estratégico fuertemente golpeado. La tasa ha sido aprobada por unanimidad de todos los grupos políticos”.
Aplicación en otros municipios
También en han significado en el Ayuntamiento que los municipios del entorno y muchos de la Comunidad vienen recuperando la aplicación dentro de la normalidad de sus terrazas. Lugares que “contienen generalmente tarifas por encima de las planteadas en esta ordenanza y menos flexibilidad en su aplicación”.
“Las tasas son tributos obligatorios que están regulados, sin embargo los precios públicos son voluntarios y permiten a las entidades públicas obtener beneficios o subvencionar distintos tipos de actividades”, han concluido en el Consistorio.